Una de las lesiones más dolorosas y temidas por los corredores es el síndrome del piramidal, que consiste en una contractura o sobrecarga del músculo piramidal. Normalmente este músculo tiende a contracturas y puede provocar una sintomatología muy similar a la de la ciática. Por esto, el síndrome del piramidal también se suele llamar “falso ciático” o genéricamente “ciatalgia”.
Presenta la sintomatología de una lumbociática, pero en este caso, no es originada por una compresión del nervio ciático a nivel de la columna vertebral y sacro. En otras palabras, lo que realmente sucede cuando ocurre esta lesión es que por el espasmo y engrosamiento muscular se comprime al nervio ciático. Esto provocará una serie de síntomas irradiados hacia la pierna, característicos de la afectación de este nervio.
El síntoma característico de esta lesión es un dolor o fuerte molestia punzante en la zona de la nalga, como una sensación de mordisco en la zona, que a veces se acompaña de un hormigueo o acorchamiento. También el dolor puede aparecer como un latigazo, como quemazón o incluso como un dolor sordo, que puede bajar por el miembro inferior.
¿Cuáles son las causas de esta lesión? Puede generarse por no respetar los tiempos de descanso adecuados en la planificación del entrenamiento, por no realizar calentamientos o estiramientos, o por realizar actividades físicas de impacto en suelos duros. Todos estos escenarios pueden desencadenar es que el piramidal se sobrecargue, provocando una contractura dolorosa que genera los síntomas de este síndrome.
Por todo esto, el objetivo del tratamiento debe ser eliminar las causas que favorecen el espasmo muscular, y relajar la zona. Para esto se puede recurrir a masajes de descargar, y a la aplicación kinesio tape. Recuerda siempre ante la aparición de síntomas que puedan implicar una lesión, consultar a un especialista.
¿Sufriste alguna vez de esta lesión?