Para muchos runners, correr durante estas semanas es una tarea difícil pero no imposible. El cierre laboral, las reuniones de fin de año, las compras, estar pendiente de los invitados y la ola de calor invita a quedarse en casa y no salir a correr, aparecen en la lista de las dificultades para entrenar.
El primer consejo para evitar quedarte sin correr en estos días es programar tus entrenamientos. Si bien nuestra agenda suele ser un verdadero un infierno por los compromisos durante las fiestas, trata de que correr sea una de las prioridades. Revisa tu semana y anota cuando crees que vas a ser capaz de realizar cada entrenamiento, al igual que lo harías con otras citas. Ten en cuenta que diciembre es un mes lleno de obligaciones y festejos, posiblemente tengas que hacer cambios en tu rutina regular de entrenamiento. Por ejemplo, si acostumbras correr después del trabajo pero tienes una fiesta por la noche, despertarte ese día una hora más temprano y salir a correr antes de trabajar puede ser una opción. Y recuerda que una sesión 20 minutos es mejor que dejar de correr del todo, así que no pierdas la oportunidad sólo porque no tengas tiempo suficiente para entrenar lo que habías planeado originalmente.
Por otra parte, no dejes que el calor sea una excusa. Las altas temperaturas nos suelen complicar, pero elegir el horario apropiado para entrenar sin volverse loco por los ritmos, puede ser provechoso. Recuerda hidratarte muy bien, comer liviano, usar protector solar, gorra, lentes y al final de la corrida te vas a sentir mejor. Además, prepara una sesión de ejercicios en casa, creando una rutina de ejercicios para esos momentos en que no puedes ir al gimnasio. Abdominales, sentadillas y muchos otros ejercicios se puede hacer sin ningún tipo de equipamiento especial. Y si tienes escaleras en tu casa o en algún parque de la zona, aprovéchalas para subirlas y bajarlas, con lo que lograrás un ejercicio aún más completo.
Por último, contempla seriamente la posibilidad de correr una carrera para despedir el año. Cada vez son más las ciudades y pueblos que realizan una carrera navideña o la tradicional San Silvestre. Olvídate del cronómetro y aprovecha esa excusa para asistir con amigos, compañeros de entrenamiento o la familia. Es una forma divertida de compartir un rato y no alejarte de tu pasión por correr.
¿Sueles ejercitarte en la temporada de fiestas?