Las inflamaciones de tendones, más conocidas como tendinitis, están entre las lesiones más comunes de los corredores. Esto se debe a que factor que suele causar las es la sobrecarga producto de acumulación de movimientos repetidos, algo que como sabemos ocurre en el running.
Entre las tendinitis más habituales en el running se destacan las del tendón de Aquiles y la rotuliana, que es una infamación del tendón rotuliano, una de las zonas que más sufren en nuestras piernas cuando corremos debido a la acción protagonista de la rodilla. Entre los síntomas más recurrentes de esta lesión se encuentra un dolor fuerte en el tendón, en la cara anterior de la rodilla y en las articulaciones de anclaje, así como dificultad en la movilidad. El dolor suele desaparecer con el calentamiento excepto cuando tengamos la dolencia en una fase avanzada.
A la hora de hablar de las causas más comunes hay que mencionar correr demasiado en superficies duras, con calzado en mal estado, por hacer un mal calentamiento, por entrenar de forma intensa sin la progresión correspondiente o por correr por superficies muy irregulares y con desnivel. Por lo tanto, una manera de prevenir este tipo de lesiones es haciendo un correcto calentamiento evitando así sobrecargas musculares. Además, es importante aplicar hielo al finalizar el entrenamiento para evitar cualquier tipo de molestia.
Si ya se produjo, para recuperarse de una tendinitis rotuliana es recomendable hacer reposo absoluto y someterse a tratamientos fisioterapéuticos.
¿Alguna vez sentiste dolor agudo en la rodilla?