Si buscamos información sobre alimentos que nos aporten vitaminas B, seguramente entre las listas aparecerá la levadura de cerveza. Se trata de un producto que se obtiene en el proceso de la fabricación de la cerveza, mediante el trabajo de microorganismos vivos como en el caso del yogur. En la cerveza, las responsables de fabricar levadura se llaman Saccharomyces cerevisiae, y provoca la fermentación del cereal en un alcohol o cerveza. Este hongo unicelular se ha utilizado desde el principio de la historia de la humanidad para producir no sólo cerveza, también pan y vino.
Incorporar a la levadura de cerveza dentro de la dieta regular y equilibrada puede traer beneficios para los runners, ya que debido a las exigencias a las que sometemos a nuestro organismo muchas veces necesitamos recurrir a alimentos que nos aportan un extra de nutrientes y nos dan energía para afrontar el día a día. También son adecuados para esos momentos en los que necesitamos reforzar nuestro sistema inmune para evitar los continuos resfriados propios del invierno o las infecciones. En este caso, además de los aportes nutricionales cabe destacar que la levadura de cerveza es digerida y asimilada rápidamente por nuestro cuerpo, lo que supone un beneficio extra.
En cuanto a macronutrientes, entre el 45-60% de su peso es proteína y contiene aminoácidos esenciales, por lo que una buena idea es ingerirla tanto antes como después de los entrenamientos. También, como mencionamos anteriormente, es rica en vitaminas del grupo B, que juegan un papel fundamental entre los runners ya que ayudan a metabolizar de forma correcta las proteínas, los hidratos de carbono y las grasas. Y por el lado de los micronutrientes se destacan sus aportes de fósforo (que ayuda en la formación de los huesos y en la actividad de músculos y nervio), selenio (extraordinario antioxidante). azufre (indispensable para la formación de colágeno y mantener en plena forma las articulaciones), cromo (estabiliza el nivel de glucemia en sangre), hierro (nos ayuda a evitar la anemia) y zinc (refuerza el sistema inmunológico).
Además, la levadura de cerveza suele ser utilizada por personas que quieren bajar de peso ya que contiene fibra y mejora el tránsito intestinal al mismo tiempo que al regular la glucemia en sangre, no notarás esas ganas de comer algo dulce entre horas. Dado su contenido en ácido fólico, la levadura de cerveza también es utilizada entre mujeres embarazadas o en periodo de lactancia. Y por la presencia de los aminoácidos triptófano y lisina, es muy buena para complementar las dietas de los corredores veganos.
Se suele conseguir levadura de cerveza en dietéticas. En cuanto a su presentación, normalmente viene en dos formatos: en polvo o en tabletas. Entre estas dos opciones el formato más recomendado es generalmente el polvo, ya que así nuestro cuerpo logra sintetizarla de mejor forma. Para consumirlo puede
tomar mezclada con jugos, batidos, agua u otro tipo de bebidas, o inclusive esparcirlo sobre los espaguetis u otras pastas reemplazando el queso rallado. A nivel general, la dosis recomendada para un adulto es una cucharada sopera al día y una cucharadita de té al día en niños, aunque claro está esto dependerá de cada caso particular y lo mejor es consultarlo con tu nutricionista para que te recomiende la cantidad adecuada.
¿Conocías las propiedades de la levadura de cerveza?