Las coles de Bruselas, en algunos países conocidas como repollitos de Bruselas, es una hortaliza dentro de la familia botánica de las Crucíferas, igual que el brócoli o la coliflor. Es una verdura típica de las temporadas de otoño e invierno, y además de aportar nutrientes necesarios para que nuestro organismo esté sano poseen en su composición otras sustancias que les otorgan propiedades y beneficios muy interesantes.
En cuanto a sus aportes, cada 100 gramos de coles de Bruselas contienen 4 gramos de carbohidratos, 3,5 gramos de proteína vegetal y 1,5 de grasa. Además, no aportan casi 4 gramos de fibra y son ricos en vitaminas C, E, niacina o B3, riboflavina o B2, piridixina o B6, tiamina o B1, ácido fólico o B9 y carotenos. En cuanto a los minerales se destacan sus contenidos en potasio, fósforo, calcio, magnesio, sodio, hierro, zinc, yodo y selenio. También se debe resaltar su contenido en fitoquímicos con compuestos azufrados (glucosinolatos). Y todo esto con sólo 45 kcal por cada 100 gramos de vegetales crudos.
Al ser ricas en vitamina C y contener hierro, son excelentes para prevenir o mejorar los casos de anemia ferropénica. Además, la fibra insoluble de las coles nos hace sentirnos saciados y nos ayuda a regularizar el tránsito intestinal. Y algo muy importante siempre, pero aún más en estos tiempos: son un alimento ideal para mantener nuestro sistema inmunológico en condiciones óptimas. También contribuyen a prevenir o mejorar los casos de retención de líquidos gracias a su acción diurética. Por otro lado, nos ayudan a eliminar toxinas y productos de desecho de nuestro organismo y contribuyen a mejorar los casos de insomnio y el cansancio físico y mental, por lo que pueden ser otro gran aliado en la dieta de los runners.
Por último, a la hora de hablar de la recuperación de nuestros entrenamientos, también sus nutrientes juegan un papel importante al ayudar en la formación de huesos, colágeno, glóbulos rojos y blancos. En definitiva, hay muchas razones para incluir a esta noble hortaliza a tu dieta regular. Utiliza el ingenio para incorporarlo crudo a las ensaladas, cortándolos en trozos bien finos. Otra buena opción es gratinarlos al horno con otros vegetales.
¿Tenés en cuenta las coles de Bruselas en tu dieta?