Terminó con 1,069 yardas por aire en 60 recepciones y seis touchdowns, promediando más de 17 yardas por recepción
La Universidad Cristiana de Texas (TCU, por sus siglas en inglés) vivió su mejor temporada desde que están en la Big 12, siendo la gran sorpresa de la campaña al terminar con un récord de 13 victorias y solo dos derrotas, además llegaron hasta el Campeonato de Futbol Americano Colegial tras imponerse a los Michigan Wolverines de Jim Harbaugh en los playoffs.
Una pieza importante del equipo fue el receptor Quentin Johnston, quién terminó con 1,069 yardas por aire en 60 recepciones y seis touchdowns, promediando más de 17 yardas por recepción. Sus grandes actuaciones lo han puesto como uno de los mejores receptores para el siguiente Draft de la NFL y será deseado por muchos equipos que quieran darle un impulso a su cuerpo de receptores.
Tuve la oportunidad de charlar con Quentin Johnston, quién mostró su emoción por el gran día, en el que anhela escuchar su nombre y el equipo en el que estará. Eso sí, siempre rodeado por el amor de su familia y amigos.
“Estoy muy emocionado, no muchas personas tienen esta oportunidad que se presenta una vez en la vida. Estoy muy feliz de estar aquí al igual que mi familia están contentos y orgullosos de mí”, dijo en entrevista exclusiva con ESPN.
“Me he estado preparando mucho tiempo para esto. Es algo que ha estado en mi mente. Con el apoyo de mis amigos y familia he sido capaz de perseguir mi sueño. Cuando llegue a la NFL, espero darlo todo en el campo sin importar el equipo que me seleccione y tener un gran impacto”, agregó.
El ahora ex receptor de los Horned Frogs conoce sus cualidades y lo que lo diferencia del resto de receptores que estarán en el Draft, entre ellas su físico y su habilidad al recibir el ovoide. No duda en que su calidad encajaría perfectamente en casi todos los sistemas de los equipos de la NFL.
“Soy un receptor grande y alto que se mueve como si fuera un corredor. Mis movimientos para salir de la línea son muy buenos, así como mis rutas y mi habilidad para soltar mi peso y crear separación. Además, mis yardas al atrapar, lo que puedo hacer con el ovoide en mis manos es bastante especial”, contó durante nuestra plática.
Durante la campaña lo vimos generar jugadas grandes pese a la cobertura que ejercían sobre él, demostró su capacidad para sumar yardas en espacio abierto dejando atrás rivales y, sin duda alguna, concuerdo en que tiene algo especial en las manos: seguridad para no soltar el balón.
Al ser cuestionado sobre los equipos con los que se entrevistó y en cuál de ellos encajaría mejor, Johnston simplemente respondió que “los equipos con los que me entrevisté, que fue la mayoría de ellos, podría decir que me veo en la mayoría de esos programas. Sin importar quién me elija, daré lo mejor de mí para encajar en el sistema lo mejor que pueda y planeo hacer que eso suceda”.
Considero que el receptor tiene muchas cualidades para generar un gran impacto en su llegada a la NFL, además de que tiene como fuente de inspiración a grandes nombres como DeSean Jackson y Davante Adams, dos grandes en su posición.
“Yo era un poco bajo cuando comencé a jugar, así que solía mirar a jugadores de la NFL como DeSean Jackson, ese tipo de receptores rápidos. Pero al entrar a la universidad me enfoqué más en Devonte Adams”, dijo en la entrevista.
No queda más que aguardar para conocer el destino de este joven y preparar los pañuelos para secar nuestras lágrimas, ya que se espera un momento muy emotivo cuando sea seleccionado. Y es que el receptor es muy apegado a su familia, y ver a su madre emocionarse cuando lo mencionen, será algo que le llegué muy profundo en su ser.
“Honestamente, espero una mezcla de emociones. Nada me había golpeado tanto como este momento. Pero creo que una vez que digan mi nombre, será una especie de alivio porque es para lo que he trabajado. Estoy seguro que miraré hacia atrás y veré a mi mamá, ella estará llorando, probablemente se me salgan algunas lágrimas también. Trataré de que no suceda, no soy alguien que le guste llorar, pero si la veo llorando, espero tener algún pañuelo o algo”.