Con un golazo antológico, Maximiliano Lovera le dio la victoria a Rosario Central ante Platense, por la final de la Copa de la Liga.
Habían transcurrido 40 minutos en el Estadio Único Madre de Ciudades de Santiago del Estero y el partido, que vale un título, era parejo. La igualdad en cero parecía el camino hacia el entretiempo.
Pero Lovera, el extremo formoseño que debutó con la camiseta del Canalla en 2016, tenía otros planes. El futbolista de 24 años recibió de espaldas en tres cuartos de cancha y, con un buen control, se sacó a su primera marca de encima.
Luego, pasó entre dos jugadores, le tiró un caño a Ignacio Vázquez e, ingresando al área chica y cayéndose al piso, definió de zurda cruzado, venciendo la resistencia de Ramiro Macagno y abriendo el marcador, a partir de su gran calidad individual.
En su undécimo partido en el semestre, quien también defendió las camisetas de Olympiacos, Racing, Omonia Nicosa y Ionikos Nikeas anotó su segundo gol (el otro, el 20 de octubre vs. Vélez).
Antes del epílogo de la etapa inicial, Lovera hizo amonestar a Nicolás Castro, tras inventar otro lujoso caño, mientras que en el segundo tiempo habilitó a Jaminton Campaz con un gran pase de vaselina, pero el remate del colombiano dio en el travesaño.