BUENOS AIRES -- Lionel Messi barrió con las ilusiones del Arsenal de pasar a los cuartos de final de la UEFA Champions League, de un plumazo. El capitán de la selección argentina y emblema del FC Barcelona le marcó dos goles a los gunners en el Emirates Stadium para aumentar su registro frente al conjunto londinense, al que le ha convertido 8 goles en 5 juegos durante los últimos 6 años. De esa manera, ayudó a su equipo a vencer (0-2) y a dar un paso de gigante para alcanzar la próxima fase de la Liga de Campeones de Europa.
El mejor futbolista del mundo apareció en toda su dimensión a veinte minutos del final de un encuentro en el que cualquier cosa podría haber ocurrido dada la falta de pericia de los atacantes del Barça para culminar con éxito distintas maniobras de ataque, y las oportunidades de que gozó el Arsenal para desequilibrar el marcador.
El ser humano común no puede permanecer siempre inspirado, pero Messi es diferente. Le encanta desafiar a la naturaleza. Por eso, cuando Leo toma posesión del juego, los partidos se acaban antes de que el reloj marque los noventa minutos del tiempo reglamentado. El martes volvió a ocurrir.
En esta ocasión, acompañó un contragolpe liderado de frma magistral por Neymar. El brasileño se apoyó en Luis Suárez y luego enfiló a la carga por la izquierda cual bisonte enfurecido. Frenó el ‘Menino da Vila’ cerca de la línea de fondo, y cuando atrajo la marca lo suficiente como para que los zagueros del Arsenal se olvidaran de Messi, levantó la cabeza en el área y habilitó a Lionel. El movimiento del 10 pareció simple y en esa sencillez se vio reflejada la perfección a la hora de ejecutar el 0-1. Pinchó la pelota con la suela del botín izquierdo, con el propio control quirúrgico se dio tiempo y espacio para armar el disparo, y tras un leve amague que el arquero Peter Cech se devoró sin masticarlo, remató a media altura cuando la escena necesitaba para resolverse, precisamente, un pase a la red.
Messi conseguía vulnerar por fin, y en Londres, la resistencia de un portero acostumbrado a clausurarle el arco. Doce minutos después iba a cambiar por gol un penal que le cometería el francés Mathieu Flamini. Tras engañar al meta Cech, le colocaba cifras definitivas al tanteador y le ponía un rumbo fijo para la eliminatoria.
El partido de Messi reflejó un demoledor índice de eficacia. D10S disparó 3 veces al arco de Cech, cuya imbatibilidad frente al crack estaba a punto de alcanzar los 10 años desde aquel lejano 7 de marzo de 2006, cuando el arquero checo defendía los colores del Chelsea. En 2 ocasiones Messi disparó entre los tres palos, y ambos remates los convirtió en goles. Cometió 1 falta y sufrió 3, y completó 63 pases de 72 intentos de pasada de balón (88% en el juego de posesión).
La llave entre el Barcelona -que contra los de Wenger utilizó en esta oportunidad una camiseta color helado de crema del cielo-, y el Arsenal se resolverá el próximo 16 de marzo en el Camp Nou, estadio del conjunto azulgrana. Los dirigidos por Luis Enrique parten como los grandes candidatos a ganar un título que ya consiguieron en la temporada pasada. El desafío es convertirse en el primer equipo en la historia de la Liga de Campeones de Europa que logra ganar el título en dos aos consecutivos.
Ya lo dijo Sergio Busquets. “La alegría de ganar es permanente y queremos vivirla siempre. Cuando perdemos parece que el mundo se detuviera y a ninguno nos gusta eso. Somos un grupo joven y con muchas ganas de seguir haciendo historia. En ello estamos enfocados”.
Si 2014-15 fue una temporada mágica para los culés, 2015-16 amenaza con no quedarse atrás. Todo apunta a que lo mejor está por venir.