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Gabi: "Hoy, la Europa League es una mie..."

MADRID -- El Atlético de Madrid no cree en la “remontada milagrosa” que los ponga en octavos de final de la Champions League. A los rojiblancos no les queda un ápice de aquel carácter infranqueable con que llegaron a dos finales en tres temporadas.

Tras el empate 1-1 frente al Qarabag de este martes que los deja al borde de eliminación, la moral rojiblanca ha tocado fondo. Tanto, que incluso reniegan de la Europa League, ese torneo que tantas alegrías le dio a principios de la década.

“A día de hoy la Europa League es una mierda”, dijo sin pestañear el capitán del Atlético de Madrid, Gabi Fernández, tras el encuentro.

“Pero si nos toca jugarla iremos a ganarla, como siempre”, agregó el canterano rojiblanco, un tanto resignado.

Después de cuatro temporadas consecutivas alcanzando por lo menos los cuartos de final de Champions League, los rojiblancos se han acostumbrado a la buena vida. A codearse con los ‘grandes’ en condición de casi iguales. A las ganancias por los partidos europeos, que para el Atlético podrían representar hasta 20 millones de euros. A los jugosos contratos publicitarios que llegan a raudales para los jugadores con proyección internacional.

Pero la mala racha en Europa, donde aún no conocen la victoria y suman tres empates y una derrota, aunada a la sequía goleadora del equipo les hace temer lo peor.

Los rojiblancos necesitan casi un milagro para avanzar a la siguiente fase: vencer al Chelsea en Stamford Bridge y al líder del grupo, la Roma, en la última jornada de la fase de grupo.

Además, necesita que alguno de los dos pierda con el Qarabag, un equipo que sólo ha logrado cosechar puntos frente al Atlético de Madrid. Algo que molesta de sobremanera a los hombres del Cholo.

“Nadie ha dicho que sea imposible, pero claro es que es muy difícil. Ahora mismo estamos fuera (de la Champions); las opciones son remotas", reconoció Gabi, quien puntualizó que el vestuario está “jodido” al no poder vencer al “rival más débil del grupo”.

Gran parte de la responsabilidad de la debacle está en la sequía goleadora de los delanteros rojiblancos. Ángel Correa es el máximo goleador del equipo con cuatro tantos, una cifra discreta para delantero de equipo de ‘elite’.

Antoine Griezmann, el jugador estrella del plantel, no ha marcado un solo tanto en los últimos cinco partidos. Apenas ha logrado marcar tres tantos, dos en Liga y uno en Champions League, el único tanto rojiblanco en el torneo. Kevin Gamiero, hoy casi repudiado por su afición, no está mucho más fino. Suma un tanto en seis partidos disputados y Fernando Torres, que juega poco y nada, ni eso.

Y lo peor: Yannick Carrasco y Koke, los que parecen mantener medianamente a flote el barco, siguen lesionados.

“Todos somos responsables y tenemos que hacer autocrítica. No podemos tirar balones fuera”, dijo Gabi, quien sin embargo dice no entender en qué momento perdieron el control de la situación y la chispa, sobre todo.

“Está cambiando la cosa. Antes necesitábamos nosotros pocas ocasiones para hacer gol, ahora son los rivales”, lamentó Gabi después de un encuentro en que el Atlético de Madrid necesitó hasta 32 disparos para marcar un tanto para rescatar el empate.

Qarabag, en cambio, tomó la delantera en el segundo de sus escasos tres intentos a puerta a través de un cabezazo del español Míchel.

“Es más un tema mental que físico de los delanteros”, se aventuró a reconocer el mediocampista rojiblanco.

Tal es la situación en el Atlético de Madrid, que la espera hasta enero en que puedan inscribir a Diego Costa y Vitolo una vez cumplida la sanción impuesta por la FIFA sin realizar fichajes. Pero de tan oscuro que se ve el panorama, quizás para entonces ya será demasiado tarde.

“Si de aquí a enero seguimos con esta racha de resultados la llegada de Diego (Costa) no va a servir para nada”, concluyó Gabi.