Cuando haya terminado la suspensión que la UEFA impuso al Manchester City por inclumplir las reglas del Fair Play Financiero, siete futbolistas del cuadro inglés ya habrán terminado contrato y a seis más solo les restaría una año más de relación con los Citizens.
La suspensión por dos temporadas de todas las competencias europeas (Champions League y Europa League) amenazan el proyecto futbolístico del equipo inglés, debido a que la ausencia de las competencias continentales representaría dejar de ingresar un promedio de 67 millones de euros por temporada, tan sólo por los premios deportivos de participar en el torneo de campeones de Europa.
En el periodo 2014-2019, según documentos de la UEFA, Manchester City obtuvo 336.8 millones de euros por participar en la Champions League. Su logro más importante fue llegar a las semifinales en 2016, pero fue la temporada pasada cuando recibió más dinero de la UEFA (93.2 millones de euros) por las compensaciones económicas que el organismo europeo otorga a los participantes.
Es decir, en promedio, cada temporada el cuadro inglés recibió 67 millones de euros, que representan el 10% de sus ingresos durante el último ciclo (2018-2019) donde registró 610 millones de euros, según el reporte Football Money League de Deloitte.
Según el mismo documento, en los últimos cinco años el equipo inglés aumentó en 31% sus ingresos, al pasar de 463 millones de euros en 2015 a los 610 millones en 2019.
Jugadores como David Silva, Leroy Sané, Sergio Agüero, John Stones y Nicolás Otamendi conluyen contrato con el club en 2022, pero sin aspiración de pelear por 'La Orejona' pueden pedir su salida o no aplicar una renovación del acuerdo.
Raheem Sterling, Kevin de Bruyne y Gabriel Jesus terminan contrato con el City en 2023, por lo que también cae la amenaza de puedan salir del club.
Además de la suspensión, el club deberá cubrir una multa de 30 millones de euros, que representa menos del 5% de los ingresos que el City obtuvo la temporada pasada.
Incluso, en el rubro de los acuerdos comerciales, es decir sus ingresos por patrocinios y que fue la causa del castigo, el cuadro inglés reportó 261 millones de euros, que representan el 43% del total de sus ingresos.