En conversación con El Mercurio, el jugador de la Universidad Católica contó: "Me queda poco. Probablemente este año sea el último. En la UC cumplí una etapa por todos los años que llevo, por la responsabilidad que asumí en lo que quiero que sea el club: que siga creciendo, ganando cosas… Es una linda etapa para cerrar estos siete años que llevo desde que llegué la ultima vez. Puede ser lo último".
Respecto a su decisión, sostuvo: "Es un proceso natural. Hemos tenido años de mucha exigencia, de autoexigencia, de querer ganar, salir campeones siempre, de no aflojar nunca".
"Hay momentos en que uno va perdiendo esa energía por un desgaste natural de los años y ya no se puede contagiar como siempre lo hice y como siempre he querido hacerlo. Además tengo cuatro hijos, van creciendo, y quiero estar más tiempo con ellos", añadió.