Una nueva victoria cosechó anoche Universidad Católica, elenco que derrotó por 2-1 a Unión Española en el estadio Santa Laura, en un encuentro marcado por la expulsión del lateral hispano Stefano Magnasco a los 35 minutos.
A pesar de esta con un hombre más por largos pasajes del encuentro, los cruzados no pudieron ampliar la ventaja en el marcador, situación que le dejó un sabor de boca bastante amargo al técnico Tiago Nunes.
En conferencia de prensa, el brasileño partió su análisis señalando que "el partido fue parejo, llegaron muchas veces y nosotros salimos bien de atrás, tuvimos una buena primera fase de construcción, pero en la última fase de creación nos faltó estar más finos para conectar el último pase".
"Después, con un jugador más en la cancha cambia el partido. El entretiempo fue favorable a nosotros, porque hemos hecho un cambio que generó un poco más de capacidad ofensiva y más llegadas", complementó el estratego.
De todas maneras, el DT advirtió que "tuvimos los goles y la chance de hacer más, pero fallamos en esas situaciones. Cuando Unión encuentra el gol a partir del balón detenido acaba generando un final de partido innecesario para nosotros. Debemos aprender a cerrar mejor los partidos".
En la misma línea, remarcó que "podríamos haber sufrido menos, pero me quedo con la sensación de que competimos bien, generamos más y tenemos que mantener el equipo en crecimiento. Ganamos y el equipo está creciendo partido a partido".
Por último, Nunes se quejó de la falta de un estadio fijo para afrontar sus duelos, puntualizando que "el equipo siempre juega de visita, nunca de local. Algunos momentos no consigue encontrar su mejor momento porque no tiene una identidad clara. Pero eso no es excusa. Tenemos que mantener lo que estamos haciendo. Por ser un equipo grande, naturalmente tenemos que pensar en ganar títulos".