Racing es campeón de la CONMEBOL Sudamericana 2024 y la defensa fue el bastión del equipo en la final frente a Cruzeiro. Santiago Sosa, Marco Di Cesare y Agustín García Basso estuvieron en un nivel muy alto en Asunción.
Gustavo Costas salió con una idea muy clara para jugar en conjunto brasileño, dejarle el control de la pelota y golpear con cada oportunidad que tuviera.
Con esta estrategia, lo que inclinaría la balanza durante el encuentro sería la eficacia en ataque y el nivel de la defensa. En ambas sector del campo, La Academia brilló.
Para tener un marco de cómo se dio el partido, solo hay que ver que Cruzeiro terminó con el 70% de la posesión y con más del doble de pases que Racing.
De los tres defensores, Sosa fue quien más se destacó. El jugador interceptó 5 pelotas y ganó la mayoría de sus duelos, excepto los áereos donde estuvo flojo (solo 1 de 4).
La orden clara que tenían era de salir rápido y largo, pero no estuvieron finos.
A pesar de esto, cuando cada uno tuvo que intervenir en el comienzo del armado de juego, fueron claves y efectivos, ya que terminaron todos con más del 60% de pases acertados.
García Basso fue el único de los tres que tapó disparos que iban al arco y entre todos, despejaron 13 pelotas.
Cada pelota que quedaba viva en las inmediaciones de Gabriel Arias, ellos 3 se encargaron de evitar el peligro y hasta por momento salieron muy lejos del área para cortar los embates de Cruzeiro. Producto de esto último, Di Cesare y García Basso fueron amonestados.
Sosa, que tiene una vocación más ofensiva, fue el que intervino un poco más en ataque, pero sin éxito.
Por supuesto que aunque La Academia salió con línea de 3 en el fondo, Gabriel Rojas y Gastón Martirena también fueron claves en defensa.
Aunque la labor de ambos estuva volcada en ataque, por momento complementaron en la última a sus compañeros.
Sin dudas, Racing tuvo un sólido partido en defensa y los números lo demuestran sin atenuantes.
Este día será recordado por generaciones de hinchas y los festejos se extenderán por varios días.