El delantero Rodrigo Aguirre comentó en declaraciones al programa Área Deportiva FM que coincidir en el grupo de la Libertadores con Peñarol y Flamengo fue una motivación extra para elegir jugar en Liga de Quito a principios del 2019. A su vez, el atacante ex-Nacional valoró el trabajo del maestro Óscar Tabarez en las selecciones juveniles de Uruguay.
“Antes de haber firmado con Liga de Quito, si bien el único contacto que tuve fue con Pablo (Repetto), se sabía del interés de otros equipos de Ecuador” recordó Aguirre, y aunque destacó que iba a respetar su palabra al entrenador hubo un factor importante para finalmente firmar en Liga: "Mi esposa no me deja mentir, en el grupo estaban Peñarol y Flamengo. Era jugar el clásico de Río de Janeiro y el clásico de Uruguay también; el hecho de que Peñarol esté en el mismo grupo fue una motivación más para decir 'sí vamos para Liga'”.
Incluso su primer gol con Liga fue justamente ante Peñarol: “Eso fue agregarle algo más. Es lindo hacer un gol siempre, pero esos goles tienen otra trascendencia, el gol que le hice a Peñarol trascendió entre mis amigos y en la hinchada de Nacional que siempre está muy presente, es distinto a cuando le haces un gol a otro equipo”.
Aguirre fue parte del proceso de juveniles de Uruguay en 2011 en la selección Sub 17 y en 2012 formando parte de la preselección Sub 23 de cara a los Juegos Olímpicos de Londres. El delantero destacó que sus primeros entrenamientos fueron apenas meses después de que Uruguay lograra la cuarta ubicación en el mundial de Sudáfrica.
Así recuerda sus vivencias en el Complejo Celeste: “Es un orgullo llegar al complejo y conocer a esas personas con la humildad que tiene todo el cuerpo técnico, íbamos las juveniles y siempre estaba el maestro Tabarez. Terminado un entrenamiento nuestro técnico Fabián Coito me lo presentó y yo decía ‘¡Tabarez me estaba hablando!’ Son de los momentos que no podes creer lo lindo que es el fútbol, hacía seis meses me miraba con mi hermano todos los partidos de Uruguay en el Mundial; esos años en la selección me hicieron muy feliz”.
Aguirre fue vice campeón del mundo en 2011 perdiendo la final ante México. Luego fue parte de la sub20 y también de la selección olímpica Sub 23: “Esos años en la selección son los más lindos recuerdos que tengo en el inicio de mi carrera”.
El delantero también afirmó la presencia de Tabarez y su cuerpo técnico cada vez que trabajaba alguna selección juvenil: “Los calentamientos a veces nos los hacía el profe Herrera. Por ejemplo, yo tenía mucho problema en los tobillos, no me olvido nunca, cuando hacía algún trabajo diferenciado el maestro se acercó para decirme que a otro jugador le pasaba lo mismo y su única opción fue encontrar una rutina para fortalecer la zona y practicarla por el resto de su carrera. Todo lo que me pasaba en el complejo me quedaba marcado, no lo podía querer, estaba viviendo un sueño”.
En la citada entrevista, Aguirre también repasó su debut en la Primera División en Uruguay hasta su llegada a Liga de Quito: “Desde que tengo uso de razón juego a la pelota, tuve la suerte y constancia de nunca haber dejado de jugar al fútbol, terminé el baby y fui a entrenar enseguida a un equipo profesional y quedé. Desde siempre estaba con una pelota, es algo que pasa con mi hijo Valentín, no se puede explicar porque no es que yo estoy arriba, insistiendo para que juegue a la pelota, es algo de él”.
El delantero contó que en su debut en Liverpool jugó solo quince minutos pero que la pasó horrible por los nervios: “Más de la mitad de ese tiempo estuve con los gemelos acalambrados. Yo paso nervios el día previo del partido hasta ahora, imagínate ese primer partido y eso que no fui titular”. Actualmente los nervios no se le van hasta llegar a la cancha.
Aguirre consideró que lo más complicado en toda la carrera de un jugador son las lesiones: “Deben ser la mayor traba”. Sostiene que en el 2017 fue cuando más cerca estuvo de jugar por la selección mayor de Uruguay. Había convertido consecutivamente en cinco partidos y hubo una lesión a último momento en el plantel de Tabarez, quien sólo podía citar a un futbolista del medio local. Pero ese domingo Aguirre tuvo que salir en el primer tiempo por una lesión y al otro día quien fue citado fue su compañero Sebastián Fernández.
‘Papelito’ no jugaba de centrodelantero en Nacional por la presencia de Aguirre, quien comentó: “Creo que ese fue el momento que estuve más cerca de ser citado por la selección, pero no lo voy a saber nunca porque me lesioné el día antes”.
En el tricolor se perdió la definición del campeonato al estar dos meses con dolor en la rodilla: “Las lesiones siempre están ahí, aún con dolor seguía jugando hasta que me dicen que tenía el menisco roto. Hice musculación para jugar ante el líder, jugué, empatamos y desde Udinese dieron la orden de que no podía seguir jugando”.
“Mi esposa estaba embarazada y en el medio de todo esto me tuve que ir a Italia para operarme de menisco y ligamento lateral con una recuperación de tres meses. Ese año, terminé yendo a Botafogo pero no llegué en las mejores condiciones, estuve desde que me operé el 10 de diciembre hasta que nació Valentín el 28 de febrero de 2018 sin hacer una recuperación con la misma persona” comentó Aguirre quien se lamenta el no haber podido estar al cien por ciento en el equipo de Río de Janeiro.
“Si mi lesión la hubiese tenido en Botafogo después de un buen año, la hinchada me hubiera tenido más paciencia, un montón de cosas llevaron a mi salida antes de lo esperado de Brasil”. Y entonces fue Liga de Quito quien recibió al uruguayo que se ha transformado en una de las figuras del fútbol ecuatoriano.
En Liga también se encuentra la figura del fútbol mundial, Antonio Valencia. Sobre el ex Manchester United comentó: “Es un orgullo tremendo verlo en el vestuario, tener al lado un jugador que estuvo diez años compitiendo contra los mejores, son cosas que te regala el fútbol; Antonio me contesta una historia de Instagram, y vos decís ‘¡Antonio Valencia me está respondiendo!’ Lo que más destaco de él es la humildad y el profesionalismo, es el gran ejemplo que tenemos en Liga”.
Actualmente Aguirre dijo estar muy contento en Liga de Quito y espera volver a las canchas tras cumplir su sanción (en noviembre del 2019 insultó a un árbitro y fue castigado con tres meses de suspensión): “Soy un agradecido al club, al cuerpo técnico por darme siempre el aguante. Pablo siempre estuvo atento para que cuando juegue de nuevo no me vuelva a ocurrir, de los errores se aprende y estoy muy agradecido con mis compañeros y con Liga”.