Junto con Hirving Lozano y Guillermo Ochoa, Jesús Corona es uno de los tres futbolistas más importantes de la Selección Mexicana de Futbol.
Se trata de un jugador insustituible porque sencillamente el Tricolor no tiene a otro con sus condiciones y talento, más allá de que con la camiseta nacional suele tener marcados altibajos.
‘Tecatito’ estaba llamado a conformar el tridente en ataque con Raúl Jiménez —que anda en un nivel muy por debajo del que tuvo antes de la conmoción— y el ‘Chucky’, mismo que nunca acabó de explotar, pero que sin duda se mantenía como la mayor apuesta del técnico Gerardo Martino.
Corona es un futbolista descarado, el clásico jugador de barrio que pisa el balón, encara sin reparo y que con frecuencia se inventa una jugada que deslumbra. Tan capaz de asistir luego de un desborde como de definir con una técnica envidiable.
Alguna vez se dijo y con total certeza que Jesús Corona no sabe meter goles feos. Eso pierde la Selección Nacional, a un hombre que en el Sevilla estaba en franco ascenso tras recibir toda la confianza del entrenador Julen Lopetegui, y que se esperaba que llegara a la Copa del Mundo en ritmo y a un máximo nivel de competencia.
Alexis Vega aparece como el hombre que puede medianamente tomar el lugar y ejercer las funciones del ‘Tecatito’. Son de condiciones distintas, pues el futbolista de las Chivas no tiene el mismo desequilibrio ni habilidad en el regate.
A cambio poseé una visión de campo envidiable, gran capacidad para asistir y cuenta con buena pegada de media y larga distancia. Es el único que en alguna medida podrá mermar la pérdida de Corona, aunque a menos de 100 días del Mundial urge que levante su nivel, porque a la par del Guadalajara, anda de capa caída.
Así las cosas, es un golpe muy duro para el Tricolor la grave lesión del ‘Tecatito’, y no se diga lo que estará sufriendo el jugador. Toca ver para adelante, asimilar lo más pronto posible la desgracia futbolística y nada más.
De por sí los augurios en torno a la Selección Mexicana en el Mundial no son nada buenos, y ahora menos con la pérdida de uno de sus futbolistas de mayor trascendencia.