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Barcelona y Real Madrid se enfrentarán en Dallas en Clásico de pretemporada

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Jordi Alba le da la victoria a un Barcelona que acaricia el título (1:56)

El capitán culé marcó al 85' el gol del triunfo para los de Xavi, que cada vez ven más cerca la consagración en España. (1:56)

BARCELONA -- El Clásico del verano entre Barça y Real Madrid se disputará este año en Dallas. Fuentes del club azulgrana revelaron a ESPN Deportes que se están "últimando los detalles" de la gira que llevará a cabo la plantilla de Xavi Hernández por Estados Unidos y que el Cotton Bowl de la ciudad texana será la sede, "de no surgir un imprevisto", del tercer Clásico que disputen ambos equipos en Estados Unidos.

El partido está previsto para el 29 de julio, sucediendo al jugado el 24 de julio de 2022 en Las Vegas y que ganó el conjunto azulgrana por 1-0, gracias a un solitario gol de Raphinha. El primer enfrentamiento se celebró el 29 de julio de 2017 en Miami, ganado también por el Barça (3-2) y recordado por ser el último partido que jugó como barcelonista Neymar antes de su marcha al PSG.

La plantilla azulgrana tiene previsto viajar a Estados Unidos entre el 18 y el 20 de julio, regresando un día después del Clásico y habiendo jugado entre tres y cuatro partidos amistosos. A partir de ahí se pretende encajar la celebración del Trofeo Joan Gamper, cuya sede no está aún decidida, antes del comienzo del campeonato liguero de la temporada 2023-24, que previsto para el fin de semana del 12 y 13 de agosto.

CIERRE DE CURSO EN JAPÓN

Antes de todo ello, sin embargo, el Barça se desplazará a Japón para jugar un amistoso que será el que cierre la temporada actual. Tal como hizo el año pasado, cuando tres días después de acabar la Liga se enfrentó a un combinado All-Star del campeonato australiano en Sydney, el equipo de Xavi viajará directamente desde Vigo, donde acabará la Liga contra el Celta, a Tokio.

Allí, el seis o siete de junio, el Barça despedirá el curso con un choque en el que probablemente se enfrente al Vissel Kobe de Andrés Iniesta y que le reportará al club azulgrana unos ingresos similares a los cinco millones de dólares que obtuvo el año pasado por su viaje relámpago a Australia.