Barcelona, que finalizó su gira de pretemporada por Asia y regresa a España para disputar la Joan Gamper, enfrenta nuevamente problemas para la inscripción de jugadores para el debut en LaLiga y sus refuerzos no podrían jugar.
Las normativas de la RFEF indican que los equipos deben de inscribir, al menos, cinco jugadores y cumplir con el fair play financiero que exige un equilibrio entre los ingresos, egresos y la masa salarial de la plantilla.
Barcelona debuta el próximo 16 de agosto en LaLiga frente a Mallorca y de no cumplir con lo que pide la Federación sus refuerzos no podrán jugar.
Recordemos que el equipo tuvo estos mismo problemas la pasada temporada con Dani Olmo, quien estuvo bastante tiempo sin poder jugar.
Durante la gira en Asia, Joan Laporta se mostró optimista por la forma en que progresaban las inscripciones.
Los jugadores pendientes de inscripción en Barcelona
Los jugadores que todavía no fueron inscriptos son: Marcus Rashford, Joan García (25 millones de euros al Espanyol), Roony Bardghji (2.5 millones de euros al Copenhague), Wojciech Szczesny (renovó contrato) y Gerard Martín (subió del filial).
De todos los mencionados, Rashford es el que atraviesa la situación más compleja debido a su alto contrato. El delantero llegó a préstamo desde Manchester United con una opción de compra de 35 millones de euros en junio de 2026, la cual si no es ejecutada tiene una penalidad económica de 5 millones de euros para el conjunto Culé.
La presión en la masa salarial se alivianó con las salidas de Pablo Torre, Pau Víctor, Ansu Fati y Clément Lenglet, pero sigue sin ser suficiente. En los próximos días tendrían que cerrar sus partidas Iñaki Peña y Oriol Romeu, quienes no serán tenidos en cuenta por Hansi Flick.
Además de los mencionados, ningún otro jugador dejaría el equipo y esta sería la plantilla con la que Barcelona aflontará la temporada 2025/26.