BARCELONA -- El FC Barcelona se ha convertido esta temporada en el líder del mercado. Contando los 11,4 millones de euros acordados con el Palmeiras por el fichaje de un Yerry Mina que debe concretarse de forma inmediata, el club azulgrana habrá desembolsado un total de 323,9 millones de euros (de acuerdo a las cantidades publicadas por la web especializada https://www.transfermarkt.com/), superando a todos los grandes de Europa.
La cantidad podría irse por encima de los 400 millones si, como se entiende, se cumplen los 80 millones que suman los variables en los fichajes de Dembélé y Coutinho, aunque sin contabilizar esas cantidades ya significan un record en la historia del club azulgrana, que ha duplicado el tope que mantenía desde la temporada 2014-15, cuando gastó 166,7 millones.
Los gastos de esta temporada, en que el Manchester City aparece en segundo lugar con 249,3 millones de euros, tienen la consideración de oficial… Por más que pueden entrar en discusión al contemplar como al PSG, tercero de la lista con una inversión de 238 millones por las incorporaciones de Neymar y Yuri, no se le incluyen los 180 millones del fichaje de Mbappe, contabilizado como una simple cesión del Mónaco.
El joven astro francés, se entiende, será contado como fichaje la próxima temporada, tal como ocurre con Vinicius Junior, por quien el Real Madrid ya pactó un pago de 45 millones en el verano de 2018 al Flamengo.
Más allá de eso, sin embargo, en el Barça llama la atención su posición de dominio en lo que al mercado se refiere. Contando las cinco últimas temporadas solo los dos clubs de Manchester han invertido más dinero en fichajes, situándose el City al frente con una inversión total de 879,5 millones de euros en 38 futbolistas distintos.
El United, en el mismo periodo de tiempo, gastó 777,8 millones en 20 jugadores mientras el Barcelona firmó a 22 futbolistas pagando 766,1 millones de euros. Dichas cantidades, que no variarán ya (se entiende) en el caso del Barça, aún podrían aumentar en los clubs británicos a la vista del interés del equipo dirigido por Guardiola en el fichaje de un central y en la negociación que mantiene con el Arsenal por el fichaje de Alexis Sánchez.
El PSG sería el quinto club con 678 millones, por detrás del Chelsea, que pagó 708,1 millones en la contratación de 36 jugadores… De todo ello se muestra, viendo como el Real Madrid queda bastante por detrás con 456 millones de euros en 19 fichajes en este último lustro, que el Barcelona ha resistido el músculo financiero que representan las grandes fortunas, ya sean árabes, rusas o yankees…
Pero, también, que en el Camp Nou ha comenzado a perder trascendencia la histórica filosofía de cantera que se implantó de manera indiscutible a partir del mando de Pep Guardiola hace diez temporadas. Del Barcelona que conquistó un Mundial de Clubes en 2011 con nueve canteranos en la alineación de la final o que, en la temporada 2012-13, con Tito Vilanova llegó a formar un once totalmente canterano queda apenas el recuerdo.
La columna vertebral del equipo azulgrana sigue manteniéndose en Piqué, Busquets, Iniesta y Messi, habiéndose incorporado apenas Sergi Roberto, además del retorno de Jordi Alba, pero sin hallar en la cantera sucesores para Valdés, Puyol o Xavi.
El Barcelona, pendiente de las obras de remodelación del Camp Nou que deberían pagarse a partir de la venta del apellido del estadio, mantiene el pulso económico con los grandes de Europa, hasta el punto de, esta temporada, haberse convertido en el rey del mercado… Aunque para ello haya aparcado, al menos por un tiempo, aquella personalidad única que le convirtió en dueño del fútbol apoyado en su propia cantera.