BARCELONA -- Leo Messi debutó un 16 de noviembre, de 2003, con el primer equipo del Barcelona. Se cumplen 15 años desde la primera aparición pública de la Pulga en un equipo del que con el paso del tiempo se ha convertido en su máxima estrella, atravesando el portal de la leyenda.
El argentino, que hoy cabalga en pos del récord goleador de Pele, fue citado por Frank Rijkaard por consejo de Pere Gratacós, entrenador entonces en un Barça B con el que ni había debutado (no lo haría hasta el mes de marzo de 2004) y se había ejercitado en algunas ocasiones.
Rijkaard se llevó a Portugal a Leo junto a Oriol Riera, Jordi Gómez y Manel Expósito y solventó darle entrada en aquel amistoso frente al Porto de Mourinho en el minuto 75, sustituyendo a Fernando Navarro, en una decisión que ha acabado formando parte de la historia del club azulgrana.
Tenía entonces 16 años y 145 días, llevaba 3 años en la cantera del club azulgrana y con ese debut escribía un pequeño renglón en la historia que, para nada, sospechaba pudiera tener la continuación que disfrutó después.
El Barça, invitado a la inauguración del nuevo estadio del Porto, perdía por 2-0. Expósito y Jordi Gómez ha estaban en el césped en un equipo que mezclaba titulares, veteranos y jovenzuelos. Ahí estaban Xavi, Márquez o Luis Enrique al mando de un grupo de jóvenes aspirantes que, de pronto, quedaron pasmados ante la irrupción del entonces desconocido Leo.
Disputó el último cuarto de hora de aquel amistoso, que revolucionó con su descaro, regate y atrevimiento, apenas tres días después de haber anotado un hat-trick con el Barcelona C en Granollers. Le acompañaba su familia, ilusionada a la vez que asustada por el escenario en que se dio a conocer.
💙❤️ Leo #Messi
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) 16 de noviembre de 2018
✨¡15 años del debut del 👑! pic.twitter.com/ulGCkXzk5B
Las crónicas del día siguiente se centraron en elogiar el papel de todos los debutantes, no más a Messi que a sus compañeros, y Leo regresó a su día a día. El 6 de marzo de 2004 Gratacós le hizo debutar con el Barça B ante el Mataró en el Miniestadi y no fue hasta el cabo de 11 meses después, el 16 de octubre de 2004, cuando, por fin, Rijkaard le dio la alternativa oficial con el primer equipo, en aquel famoso derbi contra el Espanyol en Montjuïc en el que sustituyó a Deco.
Hoy hablar de Messi es hacerlo del jugador más determinante en la historia moderna del Barcelona y probablemente en el mejor de toda su historia. La historia, sin embargo, comenzó un 16 de noviembre… de 2003. Hace 15 años.