BARCELONA -- Italia conquistó el domingo su segundo título de la Eurocopa, tras el logrado en 1968, en el primer torneo de la historia que se desarrolló en varias ciudades de todo el continente (y que no tendrá continuidad inmediata tras confirmarse que en 2024 la sede será Alemania).
El campeonato, que se cerró en Wembley, dejó varios nombres marcados de manera especial, de la misma manera que selecciones tanto en sentido positivo como negativo por su rendimiento.
GIGIO DONNARUMMA
Elegido mejor futbolista del torneo, primera vez en la historia de la Eurocopa que el premio recae en un portero, el joven italiano, de 22 años, las atajadas del guardameta han sido claves en la conquista del título por parte de Italia. Su rendimiento en las tandas de penalties ante España e Inglaterra fueron decisivas y le catapultaron al primer plano pensando en su futuro deportivo.
Libre de contrato al acabar su relación con el Milan, todos los pronósticos apuntan a su cercano fichaje por el PSG, aunque su representante Mino Raiola mantiene, de momento, la expectativa. Digno sucesor de Buffon y heredero de una excelente estirpe de porteros en Italia, Donnarumma está llamado a ser una de las estrellas en el futuro inmediato.
PEDRI GONZÁLEZ
Ya concentrado con la selección olímpica para redondear una temporada agotadora, el volante del Barcelona, de 18 años, fue reconocido como el mejor jugador joven del torneo continental, sucediendo en este apartado al portugués Renato Sanches, que logró el premio en 2016.
"Lo que Pedri ha hecho en este torneo, con 18 años, nadie lo ha hecho. Ni siquiera don Andrés Iniesta. Es increíble, único" proclamó el seleccionador español Luis Enrique, confirmando la opinión del equipo de observadores de la UEFA que le eligieron por unanimidad después de perderse únicamente dos minutos en la pròrroga de los cuartos de final ante Suiza y totalizar 628 de los 630 minutos posibles con un rendimiento soberbio.
CRISTIANO RONALDO
Máximo realizador histórico del torneo con 14 tantos, el veterano delantero portugués se hizo con la Bota de Oro del campeonato gracias a sus cinco goles, empatado con el checo Schick pero quedando por delante en la clasificación gracias a una asistencia.
A sus 36 años el rendimiento de Cristiano Ronaldo mantiene una espectacularidad digna de elogio: ha marcado 48 goles en sus últimos 45 partidos con la selección portuguesa, es el mayor realizador de la historia de las selecciones con 109 dianas (empatado con el iraní Ali Daei) y sigue dispuesto a engrandecer su leyenda en el equipo luso.
CHRISTIAN ERIKSEN
Fue el primer protagonista, involuntario e inesperado, del torneo al sufrir un desvanecimiento en el estreno de la competición durante el partido entre Dinamarca y Finlandia que hizo temer por su vida, provocó la suspensión durante más de dos horas del partido y quedó, médicamente, apartado del campeonato.
El suceso marcó a su selección, que perdió aquel primer partido, invitando a pensar en una pronta eliminación por el golpe moral que supuso el suceso, pero se rebeló contra el infortunio y acabó alcanzando las semifinales, que perdió en la prórroga ante Inglaterra. El futuro inmediato de Eriksen está ahora en el aire, puesto que la normativa le impide seguir jugando en Italia, donde lo ha hecho las dos últimas temporadas con el Inter de Milán.
LUKE SHAW
Incansable como lateral zurdo de la selección inglesa, fue el autor del gol más rápido en la historia de las finales. Se cumplía un minuto y 57 segundos cuando Shaw remató de primeras un centro largo de Trippier para batir a Donnarumma. Un gol que a la postre no sirvió para que los pross conquistasen el título pero que quedó marcado en los libros, superando al español Chus Pereda, que abrió la victoria de la Roja en la final de 1964 ante la URSS con un gol a los 7 minutos y 12 segundos.
ITALIA
La campeona, el mejor equipo y que mejor supo adaptarse a todas las condiciones en todos los partidos. Retocada en su ánimo bajo el mando de Roberto Mancini, desarrolló un fútbol brillante que la valió para superar con facilidad la fase de grupos y seguir creciendo en los cruces.
Dominó y sufrió primero ante Austria y después ante Bélgica, supo recordar a la vieja Italia contra España y se rebeló en la final a pesar del inicial gol de Inglaterra para llevarse un título épico.
Resguardada por un portero soberbio, Donnarumma, y sin más estrellas que el fantasista Federico Chiesa, el colectivo ha sido el mejor argumento de una Italia que ha encumbrado a dos legionarios de oro: Bonucci y Chiellini.
ALEMANIA
Una de las grandes decepciones. Se estrenó perdiendo ante Francia, mostró una imagen extraordinaria contra Portugal... Y acabó pidiendo la hora frente a Hungría para no verse eliminada en la fase de grupos.
Su despedida fue inmediatamente después: en unos octavos de final en los que la derrotó Inglaterra en un partido tan esperado a priori como decepcionante después por parte de una Alemania sin capacidad de reacción y llamada a un necesario cambio de ciclo.
FRANCIA
Regular, que no brillante, en la primera fase que superó liderando el llamado grupo de la muerte, fue a morir contra todo pronóstico en los octavos de final, eliminada por Suiza en la tanda de penalties y después de dejarse empatar un partido que dominaba por 3-1.
Campeona en 2016 y considerada la selección con más talento con el reingreso de Benzema, su juego fue una enorme decepción, probablemente la mayor del torneo.
BÉLGICA
Considerada entre las favoritas al título, formada por la llamada generación de oro, volvió a quedarse a medio camino de lo esperado. Si la eliminó Francia en las semifinales del Mundial de Rusia, esta vez volvió a caer ante el campeón, Italia, en los cuartos de final y después de un partido en el que nunca mostró su teórica superioridad.
ESPAÑA
El futuro por el que apostó, contra muchas opiniones, Luis Enrique respondió con mayor solvencia de la esperada a priori. Sin estrellas rutilantes, sin Busquets hasta el tercer partido, con problemas cara al gol (a pesar de marcar diez goles en dos partidos consecutivos) y con algunas dudas en la defensa, España redondeó un torneo estupendo en cuanto a fútbol y aunque solo ganó dos partidos de los seis disputados (uno de ellos en la pròrroga), su juego fue de lo más destacado del torneo.