Olympique de Marsella le ganó el clásico francés al PSG por 1-0 con gol de Thauvin a los 31 minutos del primer tiempo.
Pero lo más destacado del cotejo fueron los 90 minutos violentos que se vivieron dentro del campo de juego y que finalizó con cinco expulsados.
A los 9 minutos de comenzado el encuentro Neymar pisó a Payet, que estaba en el suelo, y ese fue el puntapié que generó un ambiente intenso en el ‘Parque de los Príncipes’.
A partir de allí, el brasileño fue el blanco de las patadas provocadas por los futbolistas del conjunto que dirige Andre Villas-Boas.
Cuando caducaba la primera parte, Verratti y Amavi causaron un revuelo que acabó con empujones, pero sin expulsados.
Sobre los 49, Álvaro González le entró de una manera muy dura a Di María, quien quedó revolcado en el verde césped unos minutos. Ambos habían desempeñado un controvertido momento cuando ‘Fideo’ reclamó que el español le pegó sin pelota.
Darió Benedetto ingresó a los 57 y rápidamente el anularon un gol por supuesta posición adelantada, que a pesar de que fue revisado por el VAR dejó muchas dudas.
‘El Pipa’ protagonizó una polémica situación a los 90 cuando con Leandro Paredes disputaron una pelota en el área y el delantero quedó dolorido en el suelo.
A raíz de eso, segundos más tardes el exArsenal fue con vehemencia a disputar el balón con su compatriota provocando el enojo del volante que lo terminó empujando.
A partir de allí se originó el escándalo: Neymar le pegó un manotazo en la cabeza a Álvaro González; Kurzawa y Amavi se dieron trompadas y patadas; y varios jugadores debieron ser separados por compañeros.
Como conclusión: Leandro Paredes, Darío Benedetto, Jordan Amavi, Layvin Kurzawa y Neymar, gracias al VAR, vieron la roja.
El brasileño cuando se retiró del campo de juego se acercó al cuarto árbitro y con claridad le dijo: “Fue racista, por eso le pegué a Álvaro”.
De esta manera, el PSG cosechó su segunda derrota al hilo en la Ligue 1, mientras que el Marsella sumó su segunda victoria en dos encuentros disputados.