El técnico mexicano se despide del equipo campeón tras nueve meses de liderar el proyecto de Los Príncipes Azules en Liga Nacional
GUATEMALA -- El título del Torneo Apertura 2022 permitió al equipo de Cobán Imperial cortar una sequía de 18 años sin ser campeón. Sin embargo, tres meses después de la gesta histórica ante Antigua GFC, junta directiva tomó la decisión de destituir al técnico Roberto Montoya tras la derrota ante Achuapa del pasado domingo en el Estadio Verapaz.
“Los Príncipes Azules” no atraviesan su mejor momento al ubicarse en el último lugar de la clasificación con 9 puntos producto de dos victorias, tres empates y siete derrotas, por lo que no se soportó la presión de los resultados adversos y el responsable en el banquillo terminó quedando al margen.
Tras finiquitar su desvinculación con Cobán Imperial y previo a tomar el vuelo de retorno hacia México, Roberto Montoya atendió a ESPN Guatemala para compartir las conclusiones de su tercera aventura por Guatemala y exponer los motivos del cambio rotundo que tuvo Cobán Imperial en tres meses.
“La decisión que tomó junta directiva es muy respetable para mí porque al final esto es de resultados y no se estaban dando. Termino molesto conmigo por no haber logrado salir de esta situación y por no concluir un proyecto que iniciamos en junio y el ciclo terminaba en mayo. Se tomó la decisión y asumo la responsabilidad que nos corresponde”, fue la primera declaración que brindó Roberto Montoya.
Respecto a los factores que han influido en los malos resultados del equipo cobanero en este Torneo Clausura 2023, el estratega mexicano no dudó en mencionar el inicio tardío que se tuvo en el reacondicionamiento físico, las lesiones que afectaron a jugadores claves y la desconfianza que ha ido generando los resultados adversos.
“Asumimos la responsabilidad de haber iniciado tarde el trabajo, nosotros creíamos que era conveniente porque no coincidían algunos vuelos de todos los jugadores. Durante el torneo, las constantes lesiones y la recuperación de algunos jugadores no fue la adecuada y cayeron en dos ocasiones. El caso de Alejandro Galindo, Byron Leal y posteriormente Nicolás Martínez. La recuperación esperábamos que fuera pronta, no fue la adecuada y fue pasando el tiempo que fue mermando el accionar ofensivo. Le dimos la oportunidad a otros jugadores que asumieran el rol como Luis Martínez que generó buenas sensaciones. Queríamos anotar y al no hacerlo, generó la sensación de desconfianza”.
Roberto Montoya respeta la decisión que tomó junta directiva sobre su destitución, sin embargo, no comparte la misma. “Esta decisión de Junta Directiva la entiendo, aunque no estoy de acuerdo. La presión era bastante, entiendo a la junta directiva porque si al final de local no se gana y no se da el resultado esperado, era obvio que la decisión se iba a tomar en cualquier momento. Teníamos la esperanza que después de haber hecho un buen partido en Malacatán con 10 hombres y ganando íbamos a despegar, pero la gota que derramó el vaso fue ante Achuapa de local. No estoy de acuerdo con la decisión, pero la respeto porque al final era lo más obvio por la situación que se estaba viviendo”.
¿Existió ‘la camita’?
El técnico de 57 años se formó en el Pachuca, luego llegó a Guatemala como subentrenador de Antigua GFC y posteriormente asumió la dirección técnica del equipo aguacatero. En junio de 2022 inició el proyecto de Cobán Imperial para llevarlo a lo más alto de Liga Nacional y asegurando un espacio para su participación internacional.
Cobán Imperial mantuvo la base de jugadores y se tuvieron pocas incorporaciones en líneas claves. Roberto Montoya fue consultado sobre si considera que existió ‘la camita’ por parte del grupo de jugadores para no conseguir los resultados y generar su destitución.
“La desesperación les ganó. No creo que haya sido por mala intención de ellos perder ese partido ante Achuapa, al contrario, siempre he confiado en el jugador, no les voy a reprochar nada y cada uno tendrá en su consciencia lo que dejó de hacer. En esta situación soy el único responsable y lo asumo tal cual. Quedó agradecido con ellos porque nos creyeron en la primera etapa y gracias a eso, les hicimos ver que se podía ser campeón y lo lograron. Es normal entrar en una mala racha, pero no tan larga. Fue demasiada larga que permitió que la tolerancia y paciencia terminara de junta directiva”.
En cuanto al aprendizaje que le dejó la etapa con Cobán Imperial comentó: “El aprendizaje es no haber tomado decisiones correctas en el momento adecuado dentro de la cancha. No haber solicitado ciertos cambios para que la recuperación fuera la adecuada con los jugadores que eso fue lo que nos mermó bastante. En su momento, fui apoyado por el cuerpo técnico y tuvimos que ajustar ciertas cosas para hacer algo distinto y obtener resultados diferentes, cosa que no se dio. Constantemente estábamos buscando la forma para salir de este momento. Dentro de la cancha, el jugador actuaba en base al plan de juego que le proponíamos”.
Por ahora, Roberto Montoya retornará a su natal México para compartir con su familia, corregir los errores cometidos, actualizarse con nuevos métodos de trabajo y prepararse para un proyecto futuro. Se despide de Guatemala con un mensaje y no descarta la posibilidad de volver al país si se presenta la oportunidad. “Agradezco a la afición de Cobán y de Guatemala en general. Me han tratado muy bien, no tengo queja y me siento cómodo. El grupo de jugadores que tuvimos fue de grandes personas y me voy agradecido. Finalmente logré un reto personal que era ser campeón. Me voy tranquilo porque el trabajo que hicimos fue muy bueno, transparente, dimos la cara y fuimos frontales con jugadores y directiva. Salimos en buenos términos y lo único que queda es esa espinita de no haber concluido el proyecto”.