Manchester City recibió a Ipswich Town en la segunda fecha de la Premier League y, tras lo que fue un inicio complejo, se recompuso en el Etihad con tres goles en cuatro minutos para dar vuelta el partido en el primer cuarto de hora del compromiso.
El cuadro recién ascendido venía de una dura derrota ante Liverpool en casa en el debut y la segunda fecha no fue para nada menos compleja: tuvo que visitar al último campeón, que no perdonó a pesar de comenzar perdiendo.
Ipswich dio el primer golpe a los 7 minutos con un tanto de Szmodics que sorprendió a los Citizens. Sin embargo, a los 12 comenzó la remontada.
Primero, Erling Haaland marcó de penal y emparejó las acciones. Dos minutos después, un error garrafal del arquero Muric, que cedió ante la presión de Savinho, derivó en el segundo, que fue anotado por De Bruyne.
El belga prácticamente tuvo que dar un pase a la red tras la equivocación del '1', que dejó el arco solo tras una mala entrega.
Finalmente, a los 16, Haaland selló su doblete: aprovechó una excelsa habilitación de Kevin De Bruyne, eludió al portero y remató de zurda para colocar el 3-1.
Fiesta en el Etihad y la confirmación que no se hizo esperar: el City va por todo nuevamente.