Tommaso Berni, tercer arquero del Inter de Milán que no ha jugado un solo partido oficial en los seis años que lleva con el club, fue expulsado el domingo por protestar en el duelo contra Parma.
En las dos fechas que se llevan jugadas desde que se reanudó el campeonato de la Serie A del fútbol italiano tras el receso por el coronavirus, también fueron expulsados cuatro técnicos: Gian Piero Gasperini (Atalanta), Antonio Conte (Inter), Simone Inzaghi (Lazio) y Giuseppe Iachini (Fiorentina).
La lista de miembros del banco que también fueron apercibidos o echados incluye al ayudante del técnico de Juventus y a los directores deportivos de Cagliari y Brescia.
Ahora que se juega sin público hasta nuevo aviso por la pandemia, los árbitros escuchan mucho mejor lo que pasa en el banco y han estado castigando a sus miembros a diestra y siniestra.
"Lo siento. Nunca me echaron en dos años y medio", dijo Inzaghi tras invadir el terreno de juego en el partido que su Lazio le ganó 2-1 a la Fiorentina el sábado.
"Traté de ayudar al árbitro porque se armó un gran lío. Pero me pasé de la raya e ingresé al terreno de juego", explicó.
Cuando el árbitro Luca Banti lo expulsó, sin embargo, Inzaghi dijo, "no, no. No me voy".
"No me di cuenta de que me estaba echando", afirmó.
Con los estadios vacíos, las cámaras y los micrófonos pillan prácticamente todo lo que dicen jugadores, técnicos y demás personas del banco, a pesar de que ahora no están junto al terreno sino en las tribunas bajas, muy cerca de la cancha.