El brasileño no se achicó ante los abucheos en el Nemesio Diez y un pase suyo fue clave para rescatar un punto de visita
Dani Alves no se achicó en Toluca y una asistencia suya provocó un empate de último minuto ante los Diablos. Ante un tifo enorme en la grada y abucheos, el brasileño no se achicó. Acostumbrado a la presión en los grandes escenarios mundiales, el elemento de Pumas sacó lo mejor en el Estadio Nemesio Diez.
Alves salió como volante interior. El ida y vuelta fueron constantes y ni siquiera la altura de la ciudad de Toluca mermó su rendimiento. El sudamericano cada vez luce mejor físicamente pese a que en su selección quieren aguantarlo y no arriesgarlo en esta fecha FIFA entrante.
Con toda su experiencia, Dani Alves fue el motor en el medio campo, además que encontró en Eduardo ‘Toto’ Salvio a su mejor socio en la fría noche mexiquense.
Los dos jugadores con mayor calidad en el plantel felino se juntaron para hacer de las suyas, y aunque el ‘Toto’ brilló más que Alves, el brasileño puso pases que nadie imaginó en el terreno de juego, pues su visión lo hicieron crear oportunidades para sus compañeros.
Además, en el tema defensivo, Alves corrió y estuvo intenso. Su marca fue pegajosa con los elementos más habilidosos del Toluca.
De igual forma, mostró su mando y liderazgo con gritos. Pablo Bennevendo fue uno de los que recibió los mismos luego que perdió un balón en zona baja y en el cual Alves regresó en el sacrificio defensivo. En tanto, Julio González recibió indicaciones del brasileño luego de un gol anulado a los Diablos.
Dani dejó solo al ‘Toto’ en el complemento. Salvio encaró a Volpi, pero no pudo aprovechar el bombón que el brasileño le dejó para lo que pudo ser el 0-2.
Alves adelantó su posición y se colocó detrás de Dinenno para generar más peligro. Sus pases eran precisos, pero no así las definiciones de sus compañeros, quienes no aprovechaban del todo la ventaja de tener la experiencia del brasileño en la cancha.
El sudamericano nunca dejó de correr, pero no pudo creer cómo le dieron la vuelta en el marcador a su equipo. Sin embargo, en el último minuto, dio una asistencia de oro para que Julio González rematara de cabeza y rescatara el empate que mantiene vivo el sueño universitario de repechaje.