Chivas terminó con la sequía de victorias, aún sin su figura Alexis Vega por indisciplina
Llegó el día para Chivas, tras la semana complicada que vivió la institución tapatía y donde el foco fueron las indisciplinas, la posible salida de Veljko Paunovic y un entorno que se vive en el Rebaño, donde dominaban los resultados negativos. A pesar de ello, la afición que se presentó en el Estadio Akron mostró su apoyo al estratega serbio, justificándose por la final conseguida en el torneo pasado.
El Clásico Tapatío fue el escenario perfecto para Chivas y su reivindicación. El Estadio Akron, con gran parte de aficionados del Rebaño, mostraron su apoyo a Veljko Paunovic, a quien consideran importante tras haberlos regresado a una final en su primer torneo al frente del equipo. “Yo quiero que se quede, en tan poco tiempo nos regresó las alegrías” comentó un seguidor de Chivas.
Previo al silbatazo inicial, el estratega serbio reunió a sus jugadores y dio indicaciones, todos los rojiblancos atentos a sus indicaciones.
En el anuncio de la alineación, el apellido del estratega fue coreado por la afición, sin abucheos, solo aplausos hacia Veljko Paunovic, sin importar que hace apenas un par de días Almería hizo dudar al técnico de continuar al frente del rebaño.
Durante los primeros minutos, Paunovic se mostró tranquilo, cruzado de brazos y observando el juego parado desde su área técnica.
Fue al minuto 9 cuando Chivas abrió el marcador. La paz se notó en Veljko, quien solo observó el festejo de sus dirigidos, y posteriormente, se acercó a los jugadores para darles una palmada. El autor del gol, Fernando ‘El Nene’ Beltrán, luego de su celebración, se acercó a Paunovic para abrazarlo.
El estratega de Chivas realizó un gran gesto con ‘El Tala’ Rangel; se acercó al arquero tras abandonar la cancha al minuto 20 por un golpe en la cabeza, donde le dio una palmada y le dijo palabras de aliento.
La intensidad es un rasgo de Veljko Paunovic, quien al apreciar la jugada más clara de gol para Chivas, misma que no concretó Isaac ‘El Cone’ Brizuela, el serbio agarró su gorra y la aventó al césped, se dirigió a la banca y pateó con fuerza un bote que estaba en el banquillo.
Sin embargo, Ricardo Marín le devolvió la tranquilidad al estratega serbio. Al minuto 63, el ex de Celaya descontó tras un centro del ‘Pocho’ Guzmán, momento en que Paunovic se volteó a la tribuna estrechó sus manos y las dirigió hacia el cielo.
Al presentarse la intensidad por parte de Atlas, Veljko no dejó de dar indicaciones con euforia. Posterior a la anotación, Atlas mostró dominio, y Paunovic decidió irse a sentar al banquillo y observarlo con la mano en su barbilla.
La noche de reivindicación para Paunovic y su equipo no podía ser en un mejor escenario que en el Clásico Tapatío. Al 84', Ricardo Marín convirtió el 3-1, momento en que el serbio, su cuerpo técnico y jugadores suplentes, celebraron con euforia.
Veljko Paunovic celebró con el puño hacia el cielo, se quedó estático, para sellar la victoria del resurgimiento, cuando cayó el gol de Roberto Alvarado.
El juez central, Adonai Escobedo, hizo sonar su silbato para concretar el Clásico Tapatío. Veljko Paunovic se dirigió al cuarto árbitro, le estrechó la mano y se dirigió al pasillo que conecta hacia los vestidores; en el trayecto volteó hacia las gradas y levantó la mano forjando el puño.
Fueron 39 mil aficionados que celebraron la goleada de Chivas ante Atlas en el Estadio Akron, que con esto, el Rebaño terminó con la sequía de juegos sin ganar.