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Martín Galván aconseja a Gilberto Mora alejarse de malas amistades

Al igual que Mora, Martín Galván debutó a los 15 años, por eso le recomienda al jugador de Xolos que tenga paciencia y se apoye mucho en su familia


El canterano del Cruz Azul, Martín Galván, recomendó a Gilberto Mora, el recientemente debutante juvenil de los Xolos de Tijuana, que se aleje de las malas amistades y se apegue más a su familia, pues sabe, por experiencia propia, que de no hacerlo podría frustrar sus sueños en el futbol profesional.

En entrevista con ESPN, el actual jugador del Salamanca de la Segunda División de España, quien en 2008 también debutó a los 15 años, lanzó su mejor consejo para Gilberto Mora: "Que se aleje de las malas amistades, porque cuando uno empieza a tener esa fama, te sale hasta por debajo de las piedras toda esa gente que quiere acercarte a ti por interés".

Añadió: "Lo más importante es que no se desespere, porque muchas veces debutas, pero no vas a jugar muy seguido. Entonces, hay qué tener paciencia para no volverse loco".

"Yo le diría que se refugie siempre en su familia y trate de hacer una vida normal; eso es muy importante. Que vaya a la escuela, que tenga a sus amigos en la escuela, porque luego todo eso se pierde y el día de mañana ya es difícil retomar esos procesos. Que sepa disfrutar el entrenamiento, pero también fuera de este, sepa disfrutar esa parte de ser todavía un niño".

Martín Galván dijo que no hay un límite de edad en el futbol para el debut de un joven, "mientras lo sepan llevar. Yo creo que no hay ningún problema, porque al final ganas en experiencia. Y hoy en día, yo creo que es más complicado que los jóvenes se 'pierdan'. Por las redes sociales, por todos los cambios que ha habido".

Sobre cómo recuerda su debut en Primera División con Cruz Azul, manifestó que fue un momento que marcó su vida, aunque aseguró que tiene más 'fresco' en la memoria la vez que debutó con Cruz Azul en el extinto Torneo Interliga, a sus apenas 14 años.

"Ahí me debutó Sergio Markarián contra Monterrey, en Houston. Yo estaba en el séptimo equipo, era el más chico, y recuerdo que el 'Yayo' de la Torre fue a verme al Seminario Menor de Acoxpa. Acabando el partido me dijo: 'Oye, te vas a pretemporada con el primer equipo'. Y ya en La Noria, el 'profe' Markarián me vio; de hecho, yo tenía una convocatoria para la Selección Sub-15, pero al 'profe' le gusté mucho y me pidió para viajar a Estados Unidos".

Galván narró que su papá era el más emocionado: "Yo tenía 14 años y no dimensionaba lo que estaba pasando. Mi papá me llevó a Pericoapa y me compró unos zapatos de los caros; unos Nike, los Mercurial, los famosos R9. Eran de los caros en esos momentos, pero mi papá me dijo que había qué hacer el esfuerzo para que fuera con Cruz Azul como jugador de Primera División".

Señaló que entró muy 'revolucionado' al cotejo, dónde recibió empujones y choques de futbolistas ya hechos, como Felipe Baloy: "Yo no tenía cuerpo de futbolista profesional, era un niño... Todos me decían el 'niño' y por la 'novatada' me tusaron la cabeza".

Posteriormente, casi un año después, Martín Galván debutaría en liga bajo la batuta de Benjamín Galindo, a quien dijo, le aprendió mucho. Incluso, le enseñó a pegarle con las dos piernas a la pelota.

"Fue en un partido ante Indios de Ciudad Juárez; jugué como 20 o 25 minutos, y después el 'profe' Benja me dió otros 'minutitos' contra Necaxa, en Aguascalientes, pero el problema es que esos entrenadores que me querían mucho, como eran Markarián y Benja, acabando el torneo se iban. Y llegaba un entrenador nuevo, y ya no había esa continuidad".

¿Por qué se perdió Martín Galván?

Para Martín Galván está claro que lo más importante para un joven futbolista, es que después del debut tenga una cierta continuidad, "para que no se pierda después. Eso fue lo que pasó conmigo: yo estaba en el primer equipo, sí, pero no tenía esa continuidad para poder afianzarme".

Expresó que comenzó a entender que el futbol también necesitaba seriedad y disciplina, tras una vida de inmadurez, al dejar Cruz Azul.

"Cuando estás en una situación así de grande, estás en una burbuja, que cuando sales dices: 'Ah, caray, ¿esto qué es?'. Ahí empiezas a valorar y a decir: 'Tenía todo esto y hoy que estoy en Liga de Ascenso, o hasta en Segunda División, es donde uno empieza a ver qué hay jugadores que tienen una carrera por ser muy disciplinados, quizá no porque tengan tanto talento".

Sin embargo, al llegar en su primera vez al Salamanca, en 2017, comenzó a tomar las cosas diferente: "Después fui a Juárez, donde hice las cosas bien, y hoy estoy otra vez en un país donde me gusta estar, y donde mi familia está muy contenta. No sé, capaz que aquí seguimos ascendiendo y al equipo lo llevamos muy alto", compartió.