El cuadro potosino vino de atrás para imponerse a La Máquina en partido que se celebró a media semana
Cruz Azul se desplomó en el Alfonso Lastras, donde perdió el invicto y puso en riesgo el liderato tras caer 3-1 contra Atlético de San Luis en la octava fecha del Apertura 2024. La Máquina se estrelló con la expulsión de Gonzalo Piovi y con los postes que ayudaron a los tuneros a lograr la remontada con anotaciones de Franck Boli, Javier Güémez y un autogol de Erik Lira, luego de que Ignacio Rivero se encargó de abrir el marcador.
La Máquina se adueñó de la posesión del esférico desde los primeros minutos. Inquietó la portería potosina a los siete minutos con un disparo de Ángel Sepúlveda a las manos de Andrés Sánchez, pero la primera de peligro se generó cerca del arco de Cruz Azul al 13’, con un centro de Javier Güémez para Yan Oliveira, quien reaccionó tarde y no logró empujar el balón a las redes.
A pesar del dominio de Cruz Azul, Atlético de San Luis mostró ser peligroso en las contras a través de la velocidad y potencia física de Franck Boli. Al 16’, Ángel Sepúlveda mandó un disparo a un costado del arco rival, pero al 28’, los tuneros generaron la más peligrosa hasta ese momento en un balón largo que Kevin Mier cortó, aunque dejó el rebote, mismo que, ya sin portero, fue impactado por Yan Oliveira, pero Erik Lira apareció en el trayecto para impedir la caída de los celestes.
Cruz Azul finalmente abrió el marcador al 32’. La jugada nació en la banda derecha con Luis Romo, quien mandó un centro pasado para Rodolfo Rotondi, quien prendió el esférico de volea, pero salió con poca fuerza, situación que aprovechó Ignacio Rivero para desviar el balón con un testarazo y vencer a Andrés Sánchez.
La ventaja en el marcador de la Máquina solo duró tres minutos. Al 35’, Eduardo Águila, en un tiro de esquina ejecutado por Sebastien Salles-Lamonge, mandó su remate de cabeza al poste y ya con Kevin Mier fuera de la jugada, al igual que el resto de la zaga celeste, Franck Boli empujó la redonda a las redes con un testarazo.
Atlético de San Luis dio la vuelta al marcador en el tiempo agregado de la primera parte y nuevamente con la suerte a su favor con los postes. Rodrigo Dourado, desde la banda derecha, mandó un centro que fue rematado por Franck Boli. El testarazo del marfileño se impactó en el metal de la portería celeste, pero Javier Güémez, ya con el arco abierto, apareció para hacer el segundo de los locales.
Ya en la parte complementaria, Cruz Azul se volcó al ataque y generó una gran jugada colectiva al 50’ en la que un centro de Rodolfo Rotondi, desde la banda derecha, dejó a Andrés Montaño en posición franca de remate, pero el testarazo del ‘10’ de La Máquina salió a las manos de Andrés Sánchez.
Atlético de San Luis, con espacios para los contragolpes, respondió tres minutos después con un trazo largo de Sebastien Salles-Lamonge que dejó frente al arco de Cruz Azul a Yan Oliveira, quien, ante el achique de Kevin Mier, mandó su disparo a un costado de la portería de los visitantes.
La Máquina sufrió otro fuerte revés al 74’, momento en el que Gonzalo Piovi pateó a Javier Güémez, quien ya estaba tendido en el terreno de juego, luego de que Oscar Mejía, el silbante central, ya había sancionado una falta a favor de Cruz Azul.
Juan Sanabria mandó el balón a las redes al 82’ con potente disparo de izquierda desde afuera del área, pero el tanto, que hubiera significado el 3-1 para el Atlético de San Luis, fue anulado por fuera de lugar de Ricardo Chávez.
Ya con un Cruz Azul entregado, Atlético de San Luis desaprovechó una nueva oportunidad de hacer el tercero de la noche. Juan Sanabria mandó un centro raso desde la banda derecha que pasó por toda el área celeste hasta llegar a los botines de Ricardo Chávez, quien no hizo un buen contacto y mandó el balón a un costado de la portería de La Máquina.
Cruz Azul se desplomó en los últimos minutos del partido. Ya en el tiempo agregado, Atlético de San Luis buscó hacer daño con una pared entre Mateo Klimowicz y Benjamín Galdames, pero Erik Lira, quien intentó cortar la jugada, mandó el balón a su propio arco para poner el 3-1 definitivo.