La Máquina mantiene el paso arrollador y superó a los Rayos con goles de Gutiérrez, Rotondi y Faravelli.
Cruz Azul se ha convertido en una Máquina que, de momento, parece no tener freno. Los celestes golearon 3-0 a Necaxa con anotaciones de Alexis Gutiérrez, Rodolfo Rotondi y Lorenzo Faravelli para afianzarse en la primera posición del Apertura 2024 con 28 unidades luego de once jornadas.
La Máquina se impuso desde el primer minuto a un Necaxa que salió al terreno de juego a esperar en su cancha el error de los locales que les permitiera generar peligro en la portería de Kevin Mier, pero los celestes no erraron pases que comprometieran el cero en su marco.
A Cruz Azul le bastaron ocho minutos para abrir el marcador. El gol se dio en una triangulación que inició Rodolfo Rotondi al pasar a Luis Romo, quien de primera intención cedió a Alexis Gutiérrez, el encargado de hacer el 1-0 con un disparo cruzado que venció a Ezequiel Unsain.
Otra jugada colectiva de Cruz Azul terminó en el segundo tanto de la Máquina al 18'. Todo comenzó con una pérdida de balón en la salida de Necaxa ante la alta presión de los cementeros. Alexis Gutiérrez sirvió para Rodolfo Rotondi, quien sacó un disparo cruzado que culminó en las redes de la portería de los visitantes.
Ya con el 2-0 en el marcador, Cruz Azul se dedicó a mover el balón de un lado a otro sin prestarlo a Necaxa, situación que despertó el grito de "olé" desde las tribunas del Estadio Ciudad de los Deportes.
Para la parte complementaria, Necaxa ejerció una presión más agresiva en la salida de Cruz Azul, lo que hizo que la escuadra rojiblanca tuviera más tiempo el esférico, incluso mandaron el balón a las redes celestes con tanto de Tomás Badaloni al 53', pero la acción fue invalidada por fuera de lugar.
Justo en el mejor momento de Necaxa durante el partido, apareció la contundencia de Cruz Azul para hacer el 3-0 al 63' y apagar las esperanzas de Necaxa con un tanto de Lorenzo Faravelli a pase de Carlos Rodríguez.
Ya con el resultado en la bolsa, los últimos minutos del partido fueron una fiesta celeste. En la cancha, Cruz Azul movía el balón de un lado a otro y en las gradas la afición, a pesar de la lluvia, no dejó de alentar, incluso regalaron una postal al momento en el que sacaron las lámparas de sus celulares, además de que cerraron la noche con la tradicional ola.