Este viernes por la noche, Pumas y América igualaron 3-3 en una emocionante edición del Clásico Capitalino, que incluyó un par de volteretas y errores notables.
Los Pumas tomaron la ventaja con un gol de Nicolás Freire en los primeros minutos, sin embargo, no pudieron asegurar la victoria gracias a un cabezazo de Henry Martín en tiempo de compensación.
A continuación, en ESPN Digital, te presentamos las razones por las que Pumas y América terminaron repartiendo puntos en CU:
Los porteros
Los arqueros fueron protagonistas del partido, por sus grandes intervenciones y por un error muy puntual que fue directo al marcador.
Alfredo Saldívar se convirtió en el villano de los Pumas al minuto 73, luego de tocar mal el balón y entregarlo a Federico Viñas, quien no desaprovechó el regalo y puso el 2-1 temporal, ganándose reclamos de la afición que lo abucheó en cada intervención e incluso le gritó "¡Fuera, fuera!"
Guillermo Ochoa podría recibir críticas por no salir en el primer gol de la UNAM, sin embargo, tuvo intervenciones clave que evitaron la caída de su marco.
La gran producción ofensiva de los Pumas
El error de Saldívar podría haber sentenciado a la UNAM, sin embargo, el equipo de Michel reaccionó con dos goles en un lapso de dos minutos, primero Ignacio Malcorra y después Juan Dinenno perforaron la portería de Ochoa para dar vuelta al marcador y ponerse arriba 3-2, aunque eventualmente América encontró el camino al empate.
América no bajó los brazos
América estuvo dos veces en desventaja y supo remar contra la corriente. Primero, Leo Suárez anotó un gol de gran manufactura con un tiro libre desde el costado derecho del área que superó la barrera y se incrustó en las redes; el gol de Viñas tampoco fue obra de la casualidad, presionó y estuvo atento al error de Saldívar; finalmente, Henry Martín remató un balón en un tiro de esquina al 94 para igualar el partido, resultado que no sólo salvó el honor de las Águilas en el Clásico Capitalino y mantiene a América en los primeros puestos del Clausura 2020.