Hoy los elementos están en su lugar y si me preguntan, sí, soy de los que cree que este equipo es el máximo candidato a campeón.
Hoy inicia la defensa por el título de Liga MX de Cruz Azul, el primero en 23 años. Lejos de presentarse un éxodo masivo de piezas clave, lo que tenemos es una continuidad asombrosa pese a una necesaria política de austeridad. El primer paso para defender exitosamente el trono se dio desde el despacho de Álvaro Dávila.
Se acabaron esas nefastas épocas de dispendio con Guillermo Álvarez Cuevas, hoy prófugo de la justicia. Ya sabemos a dónde iban a parar muchos de esos recursos. Esta vez se ha priorizado lo deportivo. Con esa idea, renovaron los contratos de José de Jesús Corona, Pablo Aguilar, Ignacio Rivero, José Joaquín Martínez y el entrenador Juan Reynoso. No hubo contrataciones masivas, hubo continuidad y ajuste de cuentas.
La única baja en la estructura es la del director deportivo Jaime Ordiales. El diseño del plantel campeón lo hicieron tanto Ricardo Peláez como Ordiales. Con la estupenda visión de Jaime fue que llegaron a Cruz Azul tanto Luis Romo, que fue el jugador más valioso del Clausura 2021 y no falla en convocatorias de selección nacional; como el propio Rivero cuya ductilidad fue muy útil para la obtención del título. Ordiales conocía de primera mano a Romo, lo tuvo en Querétaro, sabía la clase de jugador que estaba fichando.
Lamento la baja de Ordiales, pero también la entiendo. Dávila está a cargo y es comprensible que quiera operar con su propia gente. Si pretenden que lleguen más campeonatos el trabajo desde el despacho es fundamental. Su primera misión la han resuelto bien al conservar el núcleo del plantel.
¿Por qué no creer que Cruz Azul puede repetir como campeón? No les falta nada. En cada puesto tienen un suplente sólido. Ahí sigue el goleador Jonathan Rodríguez, también Santiago Giménez que poco a poco sigue madurando, Orbelín Pineda que sigue creciendo y pronto habrá que renovarlo, y también Guillermo “Pol” Fernández que recuperó protagonismo. El plantel es uno de los tres mejores del torneo.
La última vez que Cruz Azul defendió un título de Liga terminó tercero general y quedó fuera de la Liguilla en cuartos de final a manos de América de Carlos Reinoso en el Verano 1998. Hoy los elementos están en su lugar y si me preguntan, sí, soy de los que cree que este equipo es el máximo candidato a campeón. ¿Por qué no creerlo?