El hecho de que Concacaf no busque mejor justicia deportiva permite que las decisiones no acertadas ocurran en estos partidos trascendentales
Este octagonal de Concacaf, donde se clasifican tres de manera directa y uno más hacia el repechaje, suena un poco raro al no contar con el VAR a pesar de que casi todo el mundo ya aplica la tecnología en eliminatoria hacia el Mundial.
La ausencia del video arbitraje solo demuestra estancamiento, la poca exigencia y el mal trabajo de los directivos al no igualar las condiciones y justicia deportiva con la presencia del VAR.
El VAR es una actualidad, aunque debe mejorar y contar con personajes que sí jugaron al futbol, el hecho de que Concacaf no busque mejor justicia deportiva permite que las decisiones no acertadas ocurran en estos partidos trascendentales y puedan interferir en la clasificación de alguna selección.
La aventura de Concacaf sigue por el mismo camino, y en este tipo de eliminatorias hay injusticias deportivas, lo sé por experiencia.
Los últimos tres partidos de México en el octagonal fueron capítulos completamente diferentes. El primero de ellos, ante Canadá, fue una pesadilla por la actuación poco digna y decorosa del Tri, quienes merecieron el triunfo fueron los canadienses por demostrar una mejoría táctica, estratégica e intensidad.
Canadá jugó faltándole el respeto, deportivamente hablando, a México. Ese empate tuvo sabor a derrota para los locales.
Después llegó Honduras, que sirvió por la experiencia ante la mala actuación y utilización de ciertos jugadores que ya no tienen tanta intensidad. El partido fue útil para que Gerardo Martino hiciera los cambios necesarios para vencer a los catrachos, con un resultado que quedó corto porque el Tri generó más ocasiones claras de gol.
Se vio una mejoría importante, sobretodo porque Honduras ya no está en esa época brillante donde era favorita para clasificar a la Copa del Mundo, ahora ya no da esa misma idea en la cancha.
Ese triunfo también dio cierta calma porque mantenía a México en el primer lugar de la clasificación. Y llegó El Salvador, un capítulo de visitante donde se manejaron más los temas extradeportivos de antaño donde existía la presión por la asistencia al estadio, las serenatas en la noche previa, la falta de cordialidad, etc.
El merecimiento debe verse dentro de la cancha, no desde las tribunas lanzando objetos e insultando. En esos partidos se ve la presión y la tensión de los países de Centro América, Norteamérica y el Caribe hacia el gran referente de la Concacaf.
Pero la calidad y el talento superaron esas intensiones, la victoria fue merecida para México ya que el Tri mostró mayor efectividad, además de tener el mérito por tratarse de una plaza difícil.
En esta fecha FIFA se vieron muestras de quiénes son los favoritos para clasificar de forma directa. Primero está México, en segundo lugar Estados Unidos y en tercero Canadá, aunque futbolísticamente hablando, los canadienses pueden superar al conjunto estadounidense por ese nivel de juego que han mostrado; incluso puede superar al Tri si el conjunto azteca se descuida.
Después se encuentra una selección que está haciendo mucho ruido, Panamá, actualmente en cuarta posición, que aspira a clasificar de manera directa o por lo menos desde el repechaje al Mundial. Es difícil descartar a Costa Rica y a Jamaica por los méritos que han logrado en los últimos años y que ahora están haciendo dudar de su presencia en Qatar 2022.