Se aproxima el sorteo del Mundial de Qatar 2022 y, a falta de definir algunos participantes, desde ESPN.COM comenzamos a palpitar la previa de lo que será el trazado del camino para las 32 Selecciones que irán por la gloria. En un contexto de nervios, ansiedad y emoción por conocer a los rivales de turno en fase de grupos, el sorteo no siempre ha sido un espectáculo digno de recordar por momentos perfectos. El realizado en la antesala a la edición de España 1982 de prueba de esto, el cual ha sido recordado como 'el peor de todos los tiempos'.
Fue un sorteo atípico desde lo organizacional. El mismo fue realizado en enero de 1982 en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Madrid y se apostó por un sistema muy parecido al que usaban los Españoles en la lotería con bolilleros grandes. Además, los niños del San Ildefonso también fueron protagonistas al ser quienes llevaban las bolillas, que tenían la forma del balón que se iba a utilizar, para que las abran. Por primera vez disputaban el Mundial 24 Selecciones.
También se dio el debut de los denominados 'cabezas de serie', que desatarían la primera problemática en aquel enero de 1982. El lugar era para seis Selecciones, las cuales eran Italia, Alemania, Brasil, Argentina y España (la organizadora). El cupo final, que por mérito debía ir para Bélgica por ser subcampeona de Europa, fue otogado a Inglaterra. ¿El motivo? Por su tradición y por haber conseguido una Copa del Mundo.
El sorteo constaría, en primera instancia, por un propio sorteo en el que se decidiría qué bombo se sortearía primero: el orden fue B, C y A, los tres que estaban disponibles. La suerte de los equipos comenzó a girar dentro de la lotería española y el primero equipo sorteado fue Bélgica, que se sumó al Grupo 1 junto a Italia. Inmediatamente, Escocia fue seleccionada y saltó directamente al Grupo 3, donde Argentina era cabeza de serie. Esto ocurrió para evitar que Chile y Perú, que también estaban en el Bombo B, compartieran grupo con otra Selección de Sudamérica.
La discordia inició tras intentar sortear al tercer equipo. El niño del San Ildefonso tomó una bola del Bombo B y la llevó a la mesa directiva para que la abra y diga el nombre de la Selección. Tras segundos de inquietud, finalmente el joven volvió hacia el bombo e introdujo nuevamente la bolilla. Tras lo sucedido, Blatter tomó el micrófono y, con los primeros silbidos de fondo, indicó que la elección de Bélgica y Escocia previamente realizada debía reacomodarse. Los belgas pasaron al Grupo 3 junto a Argentina y Escocia al Grupo 6 con Brasil. Perú fue ubicado en el Grupo 1 con Italia y Chile en el Grupo 2 con Alemania.
Mientras se sorteaba los equipos del Bombo C, una nueva anécdota comenzó a escribirse en las paredes del Palacio de Congresos y Exposiciones de Madrid. La bolilla quedó atascada y la misma salió ya abierta cuando uno de los niños del San Ildefonso trató de tomarla. La risa en los niños era inevitable y la situación comenzó a teñirse de un tinte cómico. Finalmente fue Honduras quien salió de esa indomable bolilla que causó pequeños problemas en la realización del sorteo. Minutos después, cuando ya corría la suerte en el Bombo A, la situación volvió a repetirse y otra bolilla salió partida del bolillero, aunque esta vez el papel que tenía escrito la Selección que saldría quedó del lado de adentro del mismo. Entre los niños y algunos presentes comenzaron a maniobrar para intentar sacarla y, ante todo pronóstico, lo logaron: se trataba de Austria.
La siguiente bolilla en sortearse corrió con una suerte similar: quedó atascada antes de caer y nuevamente tuvieron que intervenir para sacarla. La risa ya se había apoderado de los niños de San Ildefonso y los momentos incómodos del sorteo comenzaban a ser incalculables. Finalmente el sorteo pudo completarse y, tras treinta minutos aproximadamente, los seis grupos quedaron conformados.