Lionel Scaloni, director técnico de la Selección Argentina, recibió el premio al mejor entrenador del año en Sudamérica y recordó el título mundial conseguido en Qatar 2022.
Antes de viajar a Pekín, donde la Albiceleste enfrentará a Australia el 15 de junio, en el primero de los dos amistosos de la Fecha FIFA (el otro será el 19 en Yakarta frente Indonesia), el oriundo de Pujato recibió el galardón que entrega anualmente el diario El País de Uruguay.
Scaloni, que había sido electo en marzo, por encima de Abel Ferreira y Dorival Junior, los otros finalistas, y con 107 votos de 218 posibles, bromeó por el tamaño del premio, ya que "no le va a entrar en el espacio que tiene en Mallorca" con ese fin.
Además, el seleccionador albiceleste se mostró agradecido, dado que "es un premio muy reconocido que le llena de orgullo". Y añadió: "Es fruto del trabajo de mucha gente, del cuerpo técnico, de los jugadores. Está bueno que te reconozcan, no va a cambiar mi manera de ser pero sí que es lindo el reconocimiento de la gente del fútbol, sobre todo al cuerpo técnico, somos gente que pensamos todos de la misma manera y por eso da sus frutos”.
"No solo por títulos se tendría que valorar a los entrenadores, a los jugadores. Hay veces que uno puede hacer las cosas bien y no ganar. Lamentablemente en este mundo que vivimos solo se premia al que gana, pero hay veces que no ganando se hacen las cosas bien, como pasó con nosotros en la Copa América de 2019, que no ganando se reconoció un trabajo y eso está bueno”, profundizó.
El exdefensor ahondó en la filosofía de su cuerpo técnico: “Al final, nosotros lo que hacemos es intentar que nuestros jugadores rindan lo mejor posible, que la pasen bien y sacar el máximo. Todo eso se consigue con las ganas de trabajar, con la charla que hemos tenido con entrenadores (recordó una con el Maestro Tabárez). El reconocimiento es lindo porque el fútbol sudamericano tiene sus raíces, su manera de entenderlo y que ellos reconozcan el trabajo que hemos hecho me llena de orgullo”.
Asimismo, en la entrevista con el medio uruguayo, que será publicada completa este sábado, Scaloni consideró "positiva" la derrota del debut en el Mundial ante Arabia Saudita, ya que "le dio al equipo una nueva perspectiva", porque "se lo jugaban todo y quizás eso los obligó a cambiar el planteamiento".
Sobre el estilo de juego que caracterizó a Argentina en Qatar, reflexionó: "Estamos convencidos de que hay que recuperar el balón en los primeros tres, cuatro o cinco segundos después de perderlo. Si no somos capaces de hacerlo, nos replegamos a esperar en el mediocampo. Nunca sufrimos muchos contraataques gracias al trabajo del equipo y por mantener a raya a los extremos contrarios. Así que nosotros, cuando preparamos el ataque que vamos a lanzar, también nos preparamos para los contragolpes con los que vaya a intentar responder el rival, y no sufrimos muchos".
El duodécimo entrenador argentino en recibir este premio, tras Carlos Salvador Bilardo (2), Alfio Basile, Carlos Bianchi (5), Daniel Passarella, Claudio Borghi, Gerardo Martino, Edgardo Bauza, Marcelo Bielsa, José Pekerman (3), Jorge Sampaoli y Marcelo Gallardo (3), hizo hincapié en el ajuste táctico para rodear a Lionel Messi, MVP de la Copa del Mundo: "Creo que es importante darse cuenta de lo que necesita un jugador como él. En los primeros meses con la Selección intentamos jugar un poco más rápido y de una forma algo más directa, y nos percatamos de que él no estaba cómodo, ni tampoco sus compañeros".
Scaloni, que ante la consulta de si Messi era mejor que Diego Maradona escogió a la Pulga, aunque "si pudiera elegir, se quedaría con los dos", también se refirió a lo difícil que es ganar un Mundial y al mote de campeón del mundo que tendrá ahora la Albiceleste: "Es una locura. Es muy difícil, muy emotivo, muy lindo y sobre todo... Ojalá que se vuelva a repetir, pero se tienen que alinear muchas cosas. Al ser el equipo campeón todo el mundo querrá batirlo y eso es un desafío".
El mundialista como futbolista en 2006 narró los primeros instantes posteriores a la consagración, luego del penal convertido por Gonzalo Montiel en Lusail: "Sentí que me tenía que sentar en el banco de suplentes, mirar todo lo que se estaba viviendo ahí y para mí fue un momento de disfrute. Me quedé ahí 30 segundos y vi a los jugadores y a toda mi gente celebrándolo. Todavía me emociono, creo que es un momento único. Es algo impagable... Verlos a todos ahí celebrándolo para mí fue uno de los momentos más lindos desde que empecé a jugar al fútbol, y desde que soy entrenador, sin duda alguna. Fueron 30 segundos que voy a recordar toda la vida con aprecio".
Finalmente, el pujatense, también considerado mejor DT del mundo por la FIFA en la gala de los premios The Best, contó cómo vivó los multitudinarios festejos que tuvieron lugar en todo el país, con epicentro en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires: “Todo lo que fue acá con el colectivo, ver a la gente casi a paso de hombre muy lento, y ver a la gente llorar y que te decía cosas. Eso pasaba cada 10 segundos, había millones de personas en las calles y ahí realmente nos dimos cuenta la magnitud que tenía haber ganado. Fueron dos o tres horas increíbles”.