MÉXICO -- Decio de María, presidente de la Federación Mexicana de Futbol, manifestó que el juego ante Trinidad y Tobago del 6 de octubre se disputará en San Luis Potosí porque el Tri "es de todos" y dijo que si por él fuera la llevaría a todo el país, "pero eso es imposible".
Tras el regreso de la Selección Mexicana de Costa Rica la madrugada de este miércoles, luego de empatar a un gol ante el representativo local, el directivo señaló que "al final la Selección es de todos. En esta ocasión tenemos la oportunidad de poder a sacarla del Distrito Federal y decidimos llevarla a San Luis como pudimos haber decidido otra sede".
Tanto él como Guillermo Cantú, secretario general, desestimaron que el cambio de sea para ayudar a que el llamado grito homofóbico de "eeeeh pu..." siga erradicándose del futbol mexicano, dado que en el Estadio Azteca es donde se ha hecho más popular.
Reconoció que el coloso de Santa Úrsula es la casa del Tri, pero debido a que ya se consiguió la calificación al Mundial Rusia 2017 bien puede jugar en otro lado, así se trate del último compromiso del hexagonal final de la Concacaf que tendrá el Tri en suelo Azteca.
REITERA SU CONFIANZA EN OSORIO
Respecto del resultado logrado como visitantes se dijo satisfecho. "Fue de ida y vuelta, divertido, con muchas acciones" y reiteró su confianza en el cuerpo técnico que encabeza el colombiano Juan Carlos Osorio. Dijo que el balance es positivo, "se construyó un proyecto y se está realizando de manta satisfactoria. Faltan dos Juegos y todos tenemos el objetivo, el ánimo de poder terminar en el primer lugar del grupo". De María comentó que de alguna manera los juegos eliminatorios que restan servirán para seguir afinando el equipo que competirá en la Copa del Mundo.
Reiteró lo que hace unos días señaló Cantú, en el sentido de buscar dos rivales europeos, ya sea para octubre o noviembre.
La Selección Mexicana arribó al aeropuerto Benito Juárez a las 5 de la mañana. El plantel llegó completo. Llamó la atención que el portero José de Jesús Corona haya sido el primer jugador en dejar el aeropuerto, vestido con ropa de civil a diferencia de sus compañeros. Una hora después lo hicieron tanto el técnico como los demás jugadores. A Chuy se le veía molesto y nada quiso saber de la prensa.