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Alianza Lima se debe mirar en el espejo de River Plate

El 26 de junio de 2011, River Plate descendió a la segunda división argentina después de empatar ante Belgrano de Córdoba como local en la promoción. Causó conmoción en el mundo del fútbol la caída de uno de los gigantes sudamericanos. Pero la recuperación fue tan rotunda como el derrumbe. Poco más de cuatro años más tarde, River era campeón de América.

Hoy, todo es dolor para Alianza Lima. Por segunda vez en su historia y por primera vez en los últimos ochenta años, perdió la categoría de la Liga 1 y no hay consuelo. Es la más dura tragedia deportiva que puede sufrir un club. Y aunque en días en los cuales se llora la muerte de Diego Maradona, uno de los máximos ídolos futbolísticos de todos los tiempos, parece no haber tiempo para más pena, los simpatizantes cruzados sí lloran por otros motivos.

Las similitudes con la campaña de River son muchas. La principal es el miedo que se apoderó de todos en el tramo final del torneo. Tanto River como Alianza se derrumbaron en los últimos partidos por el presión de una circunstancia inédita, anormal. Cuando terminó el Apertura, la posibilidad era cierta pero lejana, nadie la creía. Pero a medida que los puestos de descenso se acercaban, cada pelota era más pesada. Cada partido era más complejo.

De los últimos 21 puntos disponibles, el conjunto argentino solo sumó 4. El cierre de Alianza fue exactamente igual. Además, el equipo de Ahmed perdió los últimos 5 encuentros. A esos pobres números, se sumó la recuperación de sus rivales, Sport Boys y Carlos Stein. Algo similar le pasó a River con Olimpo, un equipo habituado a esa pelea que supo cómo competir.

En el partido final, ambos dependían de sí mismos y estuvieron lejos de dar la talla. El empate de River ante Belgrano y la caída de Alianza frente a Huancayo fueron solo el punto final de una larga historia. Hasta el hecho de fallar penales los hermana, en una especie de muestra de lo pesado que es luchar por no descender cuando uno está acostumbrado a otras batallas.

¿Qué hizo River después de caer? Se levantó. Sus hinchas coparon todas las canchas del país, algunas inhóspitas y desconocidas. El equipo respondió en la cancha y ascendió de forma automática, no sin sufrir. Perdió algunos partidos, luchó contra otros temores. Pero se recuperó. En 2012 volvió a primera, en 2014 fue campeón nacional y en 2015 ganó la Copa Libertadores, algo que repitió en 2018.

Alianza Lima debe tomar como ejemplo a otro gigante que supo resurgir tras la tragedia deportiva. Hoy todo es pesar, pero mañana es necesario poner en marcha el operativo retorno.