Además, el árbitro finalizó el encuentro en Denver minutos antes, debido a que la afición mexicana invadió el terreno de juego
El partido entre México y Uruguay fue detenido por unos minutos, debido a que se activó el protocolo antidiscriminación al 52', cuando el equipo sudamericano ya goleaba por 4-0 al Tricolor.
A diferencia de otros partidos, el grito fue contra el arquero mexicano, Raúl Rangel. El jugador de Chivas despejó y los aficionados en la tribuna del Empower Field at Mile High hicieron la expresión que se ha tratado de expulsar los estadios de futbol.
Eso provocó que el juego se detuviera por unos minutos y se pidiera a los aficionados que dejaran de hacer ese tipo de expresiones. El protocolo marca, en caso de aparecer el grito homofóbico, que primero se hace una llamada de atención para el público, mediante el sonido del estadio, después se pausa el juego por unos minutos y en caso de persistir la conducta, se suspende el juego.
La acción, ahora, surgió después de que el equipo de Jaime Lozano fue exhibido por Uruguay. En 50 minutos, la selección que dirige Marcelo Bielsa le anotó cuatro goles al equipo mexicano.
Entre uno de los más señalados estaba Raúl Rangel, que debutó como portero de la Selección Nacional. Además del meta, la afición también comenzó a abuchear a todos los jugadores del equipo de Jaime Lozano, al ser rebasados con facilidad por el representativo uruguayo.
México decidió utilizar jugadores suplentes para el juego contra Uruguay, a pesar que la afición respondió con creces al partido contra el equipo de Marcelo Bielsa. Más de 50 mil boletos se vendieron para un estadio que tiene capacidad para más de 70 mil.
Además, el árbitro finalizó el encuentro en Denver minutos antes, debido a que la afición mexicana invadió el terreno de juego
También hubo críticas en contra de la Selección Mexicana en redes sociales. El nombre de Guillermo Ochoa se volvió tendencia, además que se cuestionaba la ausencia de jugadores como Henry Martín e Hirving Lozano.