Se dice, como un lugar común, que es más difícil mantenerse en el éxito que llegar. Es un desafío mayor sostener la capacidad de competir que tan solo ganar una vez. Como si fuera más meritoria la continuidad que el mero triunfo aislado. Por eso, lo hecho por Gian Piero Gasperini en Atalanta tiene la importancia de la persistencia en la victoria. Su equipo será el retador del gran favorito Bayer Leverkusen este miércoles 22 de mayo en la gran final de la UEFA Europa League 2023/2024 que se verá en vivo por Star+ (Sólo para Sudamérica).
Gasperini llegó al cuadro de Bérgamo en 2016, cuando Atalanta era aún un club acostumbrado a pelear el descenso y a jugar en la Serie B. Lo transformó en un participante habitual en las copas europeas e incluso en un competidor por el Scudetto. Y en ese lugar lo sostiene desde la temporada 2016/17.
En ocho años, cualquier plantel cambia mucho. Más aún un club como este, que no maneja el presupuesto de los gigantes de su país. Entonces, el rol del entrenador adquiere otra trascendencia. No solo debe potenciar a sus futbolistas, sino también rearmar el equipo con ingenio y capacidad.
Los grandes momentos del Atalanta de Gasperini
En 2019/2020 Atalanta llegó a la última fecha de la Serie A con posibilidades de ser campeón y alcanzó los cuartos de final de la UEFA Champions League. Fue, en aquella singular temporada sacudidad por la pandemia del covid-19, uno de los mejores equipos de Europa.
Luego, la temporada siguiente, volvió a finalizar tercero en el campeonato italiano y a superar la fase de grupos de la Champions. Además, fue subcampeón de la Copa Italia. Aquella campaña marcó un quiebre, porque a partir de 2021, Gasperini tuvo que rearmar el plantel, ante algunas bajas y el inevitable paso del tiempo. Y lo hizo con tanto éxito que tras finalizar octavo en 2021/2022, terminó quinto en 2022/2023 y este año además de llegar a la final de la UEL volvió a clasificarse a la Champions.
Las figuras que forjó Gasperini en Atalanta
Gasperini debutó en Atalanta el 13 de agosto de 2016. Aquel día, contra Cremonese por la Copa Italia fue titular Rafael Toloi, uno de los jugadores que lo acompañó durante todo su ciclo. El defensor brasileño, por su velocidad e inteligencia táctica fue clave para sostener el esquema de línea de tres característico del DT italiano. Es el único de los convocados en su debut que se mantiene en el club.
También formaba parte del plantel en aquella temporada inaugural Berat Djimsiti, el central albanés que también fue pilar del ciclo y que aún hoy es fundamental para Atalanta. El tercero de los actuales que ya estaba en Bérgamo es Hans Hateboer, líder indiscutible del mediocampo durante los últimos ocho años.
Toloi, Djimsiti y Hateboer. A este trío debe sumarse Marten de Roon, Josip Ilicic y José Luis Palomino, quienes llegaron en la temporada 2017/2018 y también fueron fundamentales para sostener la idea y el funcionamiento.
Las claves tácticas del Atalanta de Gasperini para soñar con la Europa League
Consistencia defensiva en la línea de tres; dinámica y posesión en el mediocampo; potencia y velocidad en las bandas y creatividad y contundencia en ataque son las características de los mejores momentos de Atalanta. Eso es lo que quiere Gasperini y para eso cambia cuando lo necesita.
Esta temporada, el versátil de Roon ha jugado como defensor, con el eterno Djimsiti, el sueco Isak Hien y el joven Giorgio Scalvini, emblema de la renovación. En el centro del campo, Mario Pašalić, quien llegó en 2018, es el capitán y comparte el eje con Éderson. Davide Zappacosta y Matteo Ruggeri juegan en las bandas. Teun Koopmeiners puede jugar en varias posiciones del medio también. En ataque, Ademola Lookman relevó al histórico Duván Zapata y Charles De Ketelaere cumple el trabajo que supo hacer Papu Gómez.
La búsqueda es la misma, pero los nombres cambian. Algunos vienen de inferiores, como Scalvini o Ruggeri; otros de equipos menores de Italia, como Hien y Éderson; otros llegan a préstamo de clubes más poderosos, como De Ketelaere o Gianluca Scamacca, y otros son hallados en ligas extranjeras, como Koopmeiners.
Cuando parecía que la magia del Atalanta de Gasperini se apagaba, renació con un gran 2024 en el que fue uno de los mejores equipos de Italia y alcanzó la primera final europea de su historia. Ahora, intentará lo imposible: ganarle a Bayer Leverkusen y darle a Bérgamo el título que merece.