El técnico argentino Héctor Bracamonte y el futbolista Cristhian Tizón hablaron en zona mixta tras el gran triunfo de Cerro Largo sobre Peñarol por 1 a 0 en el estadio Campeón del Siglo por la última fecha del Torneo Apertura del Campeonato Uruguayo.
El entrenador del elenco arachán valoró: “Se ganó en un estadio importante, es una victoria histórica, pero fue un partido, no nos tenemos que volver locos, incluso me gustaría volver a ver el partido porque para nosotros esto solamente está empezando”.
Cerro Largo pudo ganar como visitante por primera vez en el certamen gracias al gol de Tizón al minuto 88, profundizando la crisis deportiva del Carbonero.
Bracamonte, quien lleva dirigidos cinco partidos en el elenco arachán (dos victorias y tres derrotas), destacó: “Estamos contentos obviamente, pegar un pepinazo así es único, porque siendo chico en Argentina soñaba otra cosa, pero cuando conocés a Peñarol y sabes la historia de este club, tenés la posibilidad de dirigir en Uruguay y caer en la última fecha y encima tener la suerte de llevarte el triunfo, para mí es algo insoñado. Lo estoy disfrutando, pero con cautela”.
El argentino valoró el esfuerzo de sus jugadores y subrayó que esta victoria puede ser importantísima para que ‘empiecen a creer en ellos mismos’.
En cuanto a lo planificado previamente, el exentrenador en divisiones juveniles de Boca Juniors dijo: “Sabíamos que Peñarol estaba urgido de una victoria, y también sabíamos de las bandas de Peñarol, que los dos laterales y los dos extremos nos iban a causar problemas, entonces tratamos de doblar marcas y sumamos más gente por esos sectores”.
“También tratamos de castigar a esos sectores, porque con un jugador que ataca tu mayor virtud es también tu mayor debilidad, así que intentamos atacarlos por ahí, fue un juego de sogas, y en una escapada al final sobre la punta de Jorge Benguché terminó en gol de Tizón”, comentó el argentino.
Y afirmó: “A veces salen las cosas, a veces no, a veces es una jugada la que decanta todo como pudo haber sido un cabezazo de Peñarol que nuestro arquero Lucero Álvarez sacó en el segundo tiempo u otro remate de cabeza de ellos en la primera mitad, o en cualquiera de las escapadas de Laquintana o Alonso. El fútbol a veces son momentitos, nosotros supimos aguantarlos, pegar en el final y ya no hubo más tiempo”.
Por su parte, Tizón manifestó: “Nos vamos con una sensación de alegría, porque necesitábamos los tres puntos luego de haber perdido dos partidos seguidos ante Rentistas y Liverpool, es un buen golpe anímico que motiva y da confianza para afrontar lo que viene”.
El exfutbolista de Huracán, Huracán Buceo y Villa Española dijo que Bracamonte le pidió que diera una mano al lateral izquierdo Robert Ergas y luego que sí se soltara al ataque. A los 88’, apenas 18 minutos después de su ingreso por Leandro Onetto, Tizón metió una gran diagonal de izquierda a derecha, recibió el pase de Benguché y eludió al golero Neto Volpi, para después definir de zurda ante el arco a su merced.
“Cuando vi que mi compañero controló y giró, marqué la diagonal a la espalda del zaguero, y cuando vi que me quedó la pelota traté de definir lo mejor posible. Luego de eludir al arquero confié en el borde externo de mi zurda, pero mientras entre, le pego con la suela igual”, subrayó el jugador de 26 años.