Maximiliano Castilla, jugador y uno de los capitanes de Villa Española, se pronunció públicamente luego de que el club uruguayo fuera intervenido por resolución del Ministerio de Educación y Cultura (MEC).
El defensa escribió una carta en sus redes sociales y manifestó: “Acá está la educación y la cultura. En Villa Española. Acá, donde todos los espacios que se construyen son libres y habitables. Dónde en pleno entrenamiento los niños y las niñas de la escuela lindera o de cualquier institución se sientan en la tribuna y alientan, hasta cuando la tiramos para afuera, porque acá antes de apuntalar se enseña, se educa y se aprende”.
“Donde también las manos de personas adorables le siguen dando vida a la huerta que convive junto a nosotros en el club, y de esa huerta, comida. Acá está la educación y la cultura”, señaló Castilla.
El MEC había decidido este jueves intervenir el club y, entre otras cuestiones, ordenó crear "un cuerpo normativo que regule con claridad y hacia el futuro el uso de las redes institucionales".
El futbolista Castilla continuó en su carta pública destacando las actividades sociales que se vienen desarrollando en Villa Española, ‘donde en pleno estadio una cantidad de personas se pusieron al hombro la confección de juegos para niños y niñas, de la escuela y de cualquier familia que asista al estadio’.
“De donde yo vengo, eso siempre fue un lugar ideal para crecer, aprender, ganar y perder. Lo que pasa que yo sé de dónde vengo y no de dónde vienen ustedes. Pero eso es otro cantar. O no. Lo que hay son clubes de barrio solidarios, ya lo manifestamos en una pancarta, y manifestarnos es parte de nosotros. Porque podemos y porque queremos”, enfatizó.
Y concluyó el jugador, uno de los capitanes del plantel principal que milita en la Segunda División profesional: “Acá está la educación y la cultura, en la realización de talleres que una comisión organiza y pone el cuerpo para que las oportunidades lleguen a todos los barrios, y a todos los bolsillos”.
“Acá estuvo la educación y la cultura cuando en pleno gimnasio del club, entre jugadores, cuerpo técnico y mucha gente querida, creamos un libro de poesía. ¿La intervención? La intervención fue de los niños de la escuela para pintar el diseño del libro”, sentenció el defensa de 28 años que hace algunas semanas editó su primer libro de poemas, en cuya confección artesanal participaron sus compañeros de equipo y niños y niñas de la escuela primaria pública número 382.