Damián Musto analizó esta semana el mediocampo de Peñarol y dijo qué es lo más importante que tiene el equipo aurinegro. En el programa ‘Quiero Fútbol’ (Radio Sport), el volante argentino también habló de su amistad con Andrés D'Alessandro, actual futbolista de Nacional.
El Carbonero, líder de la tabla Anual y el Torneo Clausura, deberá enfrentar este domingo a River Plate en el Parque Saroldi por la fecha 12 a la hora 16:30 sin los cuatro jugadores que fueron convocados a la Selección Uruguaya (Kevin Dawson, Giovanni González, Facundo Torres y Agustín Álvarez Martínez).
“Lógicamente son bajas sensibles, por algo están en la selección. Trabajaremos para tratar de sustituirlos de la mejor manera. Son futbolistas que marcan la diferencia, pero tenemos un plantel lo suficientemente amplio para estar a la altura. Lo más sagrado que tenemos es el grupo, lo que trabaja y compite, tratando de vivir cada entrenamiento como si fuese el último y a partir de ahí se puede seguir construyendo. Faltan pocos partidos pero son trascendentales, debemos seguir por el mismo camino”, afirmó Musto.
Consultado si disfruta del buen juego que desarrolla el elenco dirigido por Mauricio Larriera, el argentino contestó: “Lo más importante que tiene este equipo es el hecho de acostumbrarse a ganar, y a partir de los triunfos se puede ir construyendo esa idea de juego que ha ido creciendo y evolucionando, los triunfos te permiten trabajar con tranquilidad y abordar la semana con otra confianza”.
“Disfrutarlo no, hasta el día siguiente del partido no lo disfrutás ni jugando ni de afuera, afuera se vive muchísimo peor, con muchísimo más nervios, porque adentro estás recontra concentrado. Y ni aún en partidos donde hemos sacado ventaja en el marcador uno no está tenso hasta el último minuto, tratando de mantener el arco en cero, o de mantener la ventaja”, agregó.
El argentino también habló sobre Jesús Trindade y Walter Gargano, sus compañeros en el mediocampo: “El Mota es un poco más ofensivo, Jesús también puede llegar a ser esa doble función de mixto por sus características, el más posicional o por ahí quien se siente más cómodo barriendo todo lo que hay por delante de la defensa soy yo”.
Musto destacó que los volantes han sabido complementarse más allá de quiénes han integrado el doble cinco, y aceptó que el funcionamiento del tándem Trindade-Gargano ha sido muy bueno: “Han funcionado desde el principio, y a uno le ha tocado esperar tratando de ejercer esa presión para que el nivel sea alto y la competencia sea lo más justa posible, y poniendo el nombre de Peñarol antes de que cualquier interés personal”.
EL ARBITRAJE URUGUAYO, SU AMISTAD CON D’ALESSANDRO Y LA ARGENTINA DE SCALONI
El mediocampista de 34 años dijo que la tarea de los árbitros es difícil de ejercer en Uruguay, aunque en Argentina es más complicado: “Porque se juega con un grado de intensidad más alto, y entonces por ahí las entradas son más vehementes, hay más roce, menos espacios, el que estén las canchas mejores hace que la dinámica sea mayor y todo lleva a que cada choque pueda ser más fuerte”.
“Siempre es complicado el tema del arbitraje, nunca se conformará a todas las partes, cada uno pelea por lo suyo. En mi caso y el grupo también, tratamos de enfocarnos en lo nuestro, dejar eso en un segundo plano. Yo trato de dialogar lo más que se pueda con los jueces de manera respetuosa, a mí me gusta hablar e intercambiar dentro del juego”, comentó.
Musto recibió cinco tarjetas amarillas en sus primeros seis partidos como titular en el Campeonato Uruguayo: “En cada liga se arbitra de manera diferente. En mi caso traté de ir adaptándome porque a ese ritmo no podía seguir porque me la iba a pasar afuera”.
“El equipo que se hace dueño de la mitad de la cancha es un poco el que manda en el partido, entonces a quienes nos toca estar ahí es lógico que vayamos a cada pelota como si fuese la última, yo vivo el fútbol así. Si uno ve que va a llegar tarde no vas a ir, pero el ir a cada pelota con lealtad es parte del fútbol, los jueces deben entender eso, el que sabe de fútbol se da cuenta cuando vas a la pelota o vas a lastimar”, señaló.
El argentino también habló de su relación con los compatriotas Leandro Fernández y Andrés D’Alessandro, con quienes coincidió en Inter de Porto Alegre: “Con Lea tal vez hablo menos, sí intercambiando mensajes. Con Andrés nos une una relación de amistad, me ha ayudado mucho cuando llegué a Inter, las familias son amigas y nos hemos encontrado varias veces para compartir un rato y hablar de fútbol, él es muy futbolero”.
“Tenemos una relación muy linda, tratamos de dejar de lado a nuestro equipos cuando por ahí nos juntamos, nos une una amistad muy fuerte más allá de los futbolístico”, agregó Musto.
Por último, el futbolista habló del gran presente de la Selección Argentina y reflexionó sobre el técnico Lionel Scaloni: “Al principio uno interpretaba que para dirigir a la Selección se acostumbraba a elegir a un entrenador con cierta trayectoria, tal vez su llegada vino luego de una transición tras un mundial (2018) que no había sido bueno, y uno le puede dar su vuelta pero todo se termina acomodando todo porque se logran los resultados”.
“Y a partir de ahí se pudo consolidar ese grupo que venía de una transición, sumando a chicos más jóvenes. La camada anterior estuvo a punto de ganar títulos, les tocó irse, quedaron pocos y a partir del triunfo de la Copa América se logra esa tranquilidad”, consideró.
Musto sentenció: “Ahora juegan con otra soltura más allá de la idea, se nota en el jugador, en el semblante, en la confianza. No sé si es simplista este análisis o es lo que pasó toda la vida, pero si vos ganás, los ladrillos se van acomodando solos. Obviamente hay un técnico capaz y un grupo de trabajo que lo rodea que está en todos los detalles. Pero Argentina necesitaba imperiosamente ganar algo, para encarar de muy buena manera las Eliminatorias y esperando tener un buen papel en la Copa del Mundo”.