Nicolás Schiappacasse contrajo Covid-19 en la cárcel de Florida y su estado de depresión determinó que se pidiera la asistencia de profesionales para atender su caso, según reveló su abogada, Karen Pintos, a ESPN.
Schiappacasse está detenido desde el 26 de enero cuando se dirigía en un auto particular a Maldonado donde se encontró una pistola 9 milímetros. Unos días después, la Justicia dictó 90 días de prisión preventiva para el jugador de Peñarol por porte ilícito de arma de fuego, además de otros cargos por los que fue formalizado.
¿Qué pasó con Schiappacasse desde entonces? Su abogada Karen Pintos reveló a ESPN que desde que lo detuvieron, el jugador no pudo ver a su familia, que comparte el pabellón con 30 reclusos donde contrajo Covid-19, y que está aislado y deprimido.
“En un primer momento Nicolás estuvo recluido en el Centro de Ingresos durante una semana. Ahí solo los abogados lo pueden visitar. Luego lo pasaron al Centro de Reclusión de Florida, una cárcel modelo de Uruguay, pero por protocolo Covid quedó en aislamiento porque en ese momento la cárcel tenía un brote importante de la enfermedad y Nicolás dio positivo. Hemos tenido contactos diarios de manera telefónica pero nadie más lo ha podido ver”, dijo Pintos a ESPN.
La abogada del jugador expresó que Schiappacasse fue alojado en un pabellón con 30 reclusos, de los cuales 25 contrajeron Covid.
Consultada sobre si los presos que están con Schiappacasse son peligrosos, la abogada respondió: “Nicolás está cumpliendo prisión preventiva con personas que están en una situación similar desde el punto de vista procesal. Cumplen la preventiva por diversos delitos. Desconozco quiénes están con él y los delitos que cometieron. Desde que llegó estuvo aislado por la situación general de la cárcel y por la situación personal. Cuando el médico le otorgue el alta, ahí empezará a hacer la vida de rutina de todos los privados de libertad en la cárcel”.
Deprimido
Karen Pintos dijo a ESPN que Nicolás Schiappacasse necesita la contención de su padre, que está deprimido, y que por tal motivo, solicitó asistencia de profesionales.
“Está sumamente deprimido, muy deprimido. Ahora está a la espera de poder recuperarse, de tener contacto con su familia y recibir la contención de su padre porque la familia está muy presente con él. Desde que fue privado de libertad su familia no lo pudo ver”.
Pintos agregó: “Ya solicitamos asistencia (por la depresión) y estará poniéndose en funcionamiento porque allí la Comisaria Mayor es Patricia Sienra que es excelente. Pero no es nada fácil lo que está viviendo Nicolás. Si bien está en una cárcel modelo, no deja de ser una cárcel, y para las personas que son primarias es terrible pasar un día ahí”.
El futbolista debe cumplir la prisión preventiva hasta el 27 de abril y luego de ello el caso podrá terminar en un juicio o en un acuerdo.