GENOVA (Enviado especial)-- Desde que se creó hasta estos días, el estadio Luigi Ferraris, nombre en honor a un capitán histórico de Génova, estuvo marcado por el fútbol. Sin embargo, hay un duelo que lo liga con el rugby y con Los Pumas. En Scrum te contamos cómo es esta sede, que estuvo en duda en las últimas semanas por el temporal que azotó la ciudad.
En el medio de la ciudad, en los suburbios de Marassi y con las colinas de fondo, está el estadio donde el sábado jugarán Italia y Argentina. Fue creado en 1911, con capacidad para 22 mil personas. Pero en la antesala del Mundial de fútbol de 1934, bajo el gobierno del militar Benito Mussolini, se expandió a 30 mil. El único partido que se disputó ahí fue España-Brasil.
También fue escenario del Mundial 1990, con cuatro partidos: Costa Rica-Escocia, Suecia-Escocia, Suecia-Costa Rica e Irlanda-Rumania. Fue reconstruido previamente desde 1987 a 1989 y su capacidad se amplió a más de 36 mil espectadores.
Los Pumas jugaron allí en una de sus ocho visitas a Italia. Fue en 2005, y hay sólo dos jugadores actuales que estuvieron: Juan Martín Hernández, con la 10, y Juan Manuel Leguizamón entró desde el banco. También Pablo Bouza, integrante del staff de staff de Daniel Hourcade. El triunfo quedó para el lado de los argentinos por 39-22. Hubo tries de Federico Martin Aramburu, Francisco Leonelli, Gonzalo Tiesi y Bernardo Stortoni, y Felipe Contepomi aportó 19 puntos con el pie. Del lado azzurro también hubo compatriotas que se mantienen en el plantel italiano: Sergio Parisse, Luciano Orquera, Martín Castrogiovanni y Matías Agüero.
En el Luigi Ferraris juegan Sampdoria y Génova, los dos equipos de la región de Liguria, que vive días complicados por las lluvias. La Federación estuvo cerca de pasar el partido de Los Pumas a Roma, pero finalmente quedó en esta antigua ciudad portuaria, que espera por un nuevo triunfo de Italia, en un mano a mano que por el momento favorece a los argentina 13 a 5, con un empate 18-18 en 1997.