<
>

La Pride House de París 2024 ilumina el río Sena

La Casa del Orgullo celebra la diversidad y la inclusión. ESPN

PARÍS (Enviado especial) -- Mientras la transfobia 'aprovecha' los Juegos Olímpicos para apoderarse de las redes sociales en distintas partes del mundo, París 2024 lucha contra la discriminación y da visibilidad a las personas LGBTI+ en el deporte mediante una nueva edición de la Pride House.

Ubicado en una de las zonas más turísticas de la ciudad, a metros del Pont Alexandre III, que une la explanada de Les Invalides con el Grand Palais, y bajo el lema El lugar para sentirse orgullosx, un barco llamado Rosa Bonheur sur Seine alberga diariamente, hasta el final de los Juegos Paralímpicos, a miles de locales y turistas.

Se trata de la vigésimo cuarta edición de la Pride House, una iniciativa de la organización Fier-Play que tuvo su punto de partida en los Juegos Olímpicos de Invierno de Vancouver 2010 y busca promover la inclusión, la equidad y el respeto en el deporte en el marco de un "espacio seguro para simpatizantes, atletas y aliados".


Cuando Rikiki y Gigi Von-dredee interpretan Mambo No. 5 (A Little Bit Of...), canción popularizada por Lou Bega, la gente detiene su paso. No solo los que pasean a orillas del río Sena, también los que avanzan por Quai d'Orsay, unos metros arriba del espectáculo.

De hecho, esa altura les permite sentarse sobre la medianera y observar el show en un lugar privilegiado, por encima de las decenas de personas que cantan y bailan al ritmo de las drag queens.

Es domingo y, pese a que los Juegos Olímpicos no paran, la ciudad tiene otro ritmo. Con tanto estímulo en las calles, los turistas son turistas, pero los locales, en algún punto, también lo son.


Con exposiciones, obras literarias y actividades deportivas y paradeportivas, la Pride House propone un programa cultural, educativo y festivo durante los Juegos, cuyos eventos también son transmitidos mediante una pantalla gigante.

Un barco amarrado en el Sena con un amplio bar, luces de todos los colores, bolas disco y un metegol es un punto de encuentro para todos los visitantes y la gran atracción de la Pride House, que también cuenta con un espacio al aire libre para comer y compartir y con un pequeño sitio destinado a los espectáculos y las distintas exposiciones.

La Pride House cuenta con varios deportistas como embajadores, como el exclavadista Matthew Mitcham, la patinadora Poppy Starr Olsen, la jugadora de handball Marta Mangue, el esquiador Gus Kenworthy, el patinador Javier Raya, la ciclista Tara Llanes, la esgrimista Astrid Guyart, el rugbier Jérémy Clamy-Edroux, el escalador Campbell Harrison, la waterpolista Louise Guillet, el gimnasta Rayan Castro Dutra o la judoca Charline Van Snick, y su principal objetivo es concienciar al público sobre la discriminación y apoyar la visibilidad de los deportistas de la comunidad.


“París es la ciudad del amor, de todos los amores. Del amor de un día, del amor para toda la vida”, expresó Jean-Luc Romero-Michel, vicealcalde de París, durante la inauguración oficial de la Pride House, el 29 de julio, después de unos días en los que solo podían acceder al lugar quienes tenían el código QR.

Por primera vez, el Comité Olímpico Internacional (COI) apoya esta iniciativa, que también presenta la Mobile Pride House, una instalación móvil que asiste a diferentes sedes de los Juegos, y la Digital Pride House, una aplicación disponible en los celulares.

Desde la ceremonia de inauguración, París se propuso celebrar la diversidad, con la participación de varios artistas de la comunidad LGBTQIA+ en el histórico show diseñado por Thomas Jolly. Y en el marco de unos Juegos Olímpicos con 161 atletas del colectivo -según Outsports-, festejará con orgullo la diversidad iluminando el Sena.