A pocas horas del partido entre Los Teros y Namibia, Diego Arbelo, primera línea de la selección uruguaya, se enteró de la muerte de su padre mientras él se encontraba concentrado con el plantel del combinado celeste.
La dolorosa noticia llevó a que el jugador de Montevideo Cricket y Peñarol abandone la concentración para unirse a su familia ante tan doloroso momento, pero poco después el jugador tomó la decisión de volver al grupo de Los Teros y ponerse a disposición de Esteban Meneses para el encuentro ante los Welwitschias.
El head coach de los uruguayos no solo lo aceptó, sino que lo colocó como titular en la primera línea. Antes del partido, la URU le tributó un minuto de silencio en memoria del padre de Arbelo, y posteriormente el barbado jugador participó activamente del encuentro.
Empujando en cada scrum, mostrándose siempre duro y frontal en el contacto, el pilar fue una de las piezas destacadas de Los Teros en el triunfo por 26 a 18 frente a Namibia.
Una vez terminado el partido, el capitán charrúa, Andrés Vilaseca, le pidió a Diego Arbelo que sea él quién levante el trofeo que se puso en juego, a modo de reconocimiento por su compromiso con la causa y por su gran muestra de amor propio y superación.
En un momento de profundo dolor, Los Teros volvieron a mostrar la unión de un grupo que tiene los objetivos claros y que pone el foco en volver a hacer historia en la Copa del Mundo.
