Owen Farrell no fue sancionado y está habilitado para jugar de manera inmediata, luego de lo que fue su expulsión el último fin de semana ante Gales. El Comité judicial Independiente no confirmó la tarjeta roja, por lo que el apertura está en condiciones para desempeñarse con La Rosa.
Farrell compareció ante un comité judicial independiente después de haber recibido una tarjeta roja por un acto de juego sucio, contrario a la Ley 9.13, en el partido entre Inglaterra y Gales el último sábado, por un tackle alto.
El Comité escuchó el caso, considerando todas las pruebas disponibles y las presentaciones del jugador y su representante. El back reconoció que, si bien había cometido un acto de juego sucio, el acto no merecía una tarjeta roja.
Después de revisar toda la evidencia, interrogar al jugador en detalle y escuchar las presentaciones del representante del jugador, el Comité concluyó que el Oficial de Revisión de Juego Sucio se equivocó, en el balance de probabilidades, al actualizar la tarjeta amarilla emitida al jugador a una tarjeta roja.
De esta manera, el Comité determinó, al aplicar el Proceso de Contacto Principal de World Rugby, que se debe aplicar la mitigación al alto grado de peligro encontrado por el Oficial de Revisión de Juego Sucio. El Comité encontró que un cambio tardío en la dinámica, debido a un empujón de Jamie George a Taine Bashm en el área de contacto, provocó un cambio repentino y significativo en la dirección del portador de la pelota. En opinión del Comité, esto fue suficiente para llevar el acto de juego sucio del jugador por debajo de de la tarjeta roja.
“El Comité cree que esto contrasta con el oficial de revisión de juego sucio, a quien se le pidió que tomara su decisión en cuestión de minutos sin el beneficio de todo el material adicional, incluida la audiencia del jugador y su representante legal. Sobre esa base, el Comité no confirmó la tarjeta roja y el jugador puede volver a jugar de inmediato”, cerró el comunicado.