Los dos veteranos fueron protagonistas en la victoria dominicana frente a Atlanta Braves, pero con todos sus años profesionales acumulados, lo que brindan al equipo va más allá de los números.
Robinson Canó remolcó tres carreras con un bestial cuadrangular, mientras que Nelson Cruz también se voló las bardas del CoolToday Park durante el primer encuentro de entrenamientos de la Selección Dominicana de Béisbol que participará en el Clásico Mundial de Béisbol. Para muchos seguidores del equipo quisqueyano cuando vean las hojas estadísticas del encuentro frente a Atlanta Braves, eso será suficiente para decir que ambos veteranos aportaron en el terreno para su equipo.
Ciertamente, dicho aporte debe ser valorado en su justa medida y demuestra que ambos peloteros pueden producir cuando sea necesario, pero al estar alrededor del equipo dominicano, la importancia de ambos va más allá de los números.
Nelson Cruz, además de ser un respetado jugador, se ha ganado todos los halagos posibles por parte de los demás peloteros del equipo dominicano por su labor como gerente de la selección. El dirigente Rodney Linares dijo durante un encuentro con la prensa algo que ejemplifica el trabajo de Cruz, “ningún gerente te va a tomar el teléfono para decirte que está en la jaula de bateo”.
Malabarear responsabilidades como las de Cruz no es sencillo y aunque ha habido críticas al trabajo realizado, por diversos factores, no queda más que quitarse el sombrero ante el hecho de tan siquiera tratar de lograrlo y terminar con una de las selecciones favoritas para llevarse el torneo.
El caso de Robinson Canó también es uno que debe generar bastante interés. Completamente fuera de MLB, luego de un mal año en el que terminó jugando para tres equipos luego de un año de ausencia tras su segunda suspensión por violar el protocolo de uso de sustancias para mejorar el rendimiento de Grandes Ligas.
Canó jugó béisbol invernal junto a Estrellas Orientales, fue a la Serie del Caribe junto a los Tigres del Licey y su inclusión en el roster dominicano fue duramente criticado. Sin embargo, luego de ver a los peloteros hablar sobre el respeto que le tienen a Canó y cómo todos piensan que él debe ser el capitán del equipo, es entendible por qué fue incluido.
Cruz y Canó son motivadores naturales, los peloteros los respetan y más importante aún es que han estado en este escenario antes, lo que no puede ser dicho de la mayor parte de los jugadores del roster dominicano. Los dos han estado en los escenarios más hostiles que el béisbol puede ofrecer, lo han visto absolutamente todo dentro y fuera de las líneas de cal. Ese es el verdadero aporte de ambos jugadores dentro de la selección dominicana.
Para los que siempre buscan números detrás de cada jugador, a pesar de Canó estar fuera del béisbol de MLB, su carrera ha sido un tremendo referente estadístico, mientras que Cruz va en la ruta de alcanzar los 500 cuadrangulares. Hasta el momento, Canó ha jugado 17 años en Grandes Ligas, bateando para .301 con OPS de .839 y 2,639 hits, mientras que Cruz lleva 18 años en MLB, bateando para .274 con OPS de .859 y 459 jonrones.