El dominicano accionó por primera vez en la temporada tras su paso por la lista de lesionados debido a un pinzamiento en el hombro.
Miami Marlins ha sido uno de los equipos que peor suerte ha tenido de cara a 2024 con respecto a las lesiones de lanzadores. El conjunto no solamente perdió a su as de rotación, Sandy Alcántara, en 2023 tras una cirugía Tommy John que lo mantendrá fuera de acción hasta 2025, sino que también perdieron al hombre que estaba supuesto a sustituirlo, Eury Pérez, en una situación similar a la de Alcántara. Para hacer las cosas peores, también perdieron, aunque de manera momentánea, a alguien con la proyección de acompañar a ambos lanzadores, el también dominicano, Edward Cabrera.
Tras múltiples semanas fuera de acción, Cabrera regresó a la acción de Grandes Ligas en una jornada donde se mostró dominante. Cabrera lanzó seis entradas de una carrera y diez ponches, lo cual, a pesar de no ser suficiente para lograr el triunfo, sí es una gran señal de dónde se encuentra físicamente el lanzador dominicano.
“Estaba bien emocionado, porque ahí es donde quiero estar. Quiero ayudar al equipo como pueda. Ésa es la mentalidad. Dar lo mejor de mí y poder ayudar al equipo”, dijo Cabrera a los medios de prensa tras el partido del lunes.
Con las ausencias de Alcántara y Pérez, ahora recae sobre Cabrera tratar de llenar esos huecos y, dependiendo las circunstancias, hasta convertirse en el hombre más importante de esa rotación abridora. Su primera aparición es un paso en la dirección correcta, mostró que está completamente recuperado, pero eso no será suficiente, el quisqueyano tiene que superar todo lo que ha hecho a nivel de Grandes Ligas en el pasado.
Sin contar su primera salida de 2024, Cabrera tiene efectividad de 4.01 en 197.2 entradas de labor, con promedio de hits y bases por bolas por entrada lanzada (WHIP) de 1.336, pitcheo independiente de defensa (FIP) de 4.78, un ERA+ de 108, 221 ponches y 118 bases por bolas.
Dichos números tienen que mejorar si los Marlins quieren tener algún semblante de ser competitivos en la actual temporada, una en que nada parece salirles bien. Cabrera dio un paso en la dirección correcta, pero aún falta mucho.