Siendo uno de los bateadores de mayor poder en Grandes Ligas, el designado de los Phillies enfrenta el rol tradicional de los jugadores que se colocan como primeros en una alineación.
Históricamente, desde que uno tiene la oportunidad de uniformarse para jugar béisbol por primera vez, es común escuchar que cada jugador colocado en una alineación tiene un rol específico definido. Por lo regular, el centro de la alineación es guardado para los hombres de poder, encargados de remolcar carreras, mientras que los primeros puestos son para hombres con capacidad de embasarse y de mucha velocidad, para así aprovechar el poder de los bateadores del corazón del lineup.
El béisbol ha cambiado muchísimo en las últimas décadas y esos roles ya no están escritos sobre piedra como en otras épocas, sin embargo, siendo el béisbol un deporte que se tarda en adaptar cambios, hay situaciones que siguen tal y como fueron hace tiempo. El rol del primer bateador en el lineup sigue siendo el de embasarse y aprovechar cualquier batazo para alcanzar la base adicional, pero hay un hombre que está desafiando, de forma exitosa, ese rol, con un desempeño completamente distinto a lo que tradicionalmente se espera de los bateadores que son colocados de primero en la alineación: Kyle Schwarber.
¿Cuántos equipos, en la actualidad, pueden darse el lujo de decir que su primer bate es un pelotero que puede conectar 40 cuadrangulares en una temporada? En estos momentos, solo los Philadelphia Phillies, equipo de Schwarber, y Los Angeles Dodgers con Shohei Ohtani, pueden hacerlo.
El caso de Schwarber es particular, porque el estadounidense se aleja por completo del bateador tradicional que es colocado en ese puesto en una alineación. Schwarber es puramente un bateador de poder con un porcentaje de embasarse (OBP) de apenas .350 y un promedio de bateo de .226 desde que llegó a los Phillies. No es un corredor particularmente rápido, en parte por su contextura física, ni es un gran robador de bases, siendo 10 su mayor cantidad de carrera para una temporada (logradas en 2022 y 2025), pero los Phillies han encontrado oro al utilizarlo como el primer bate titular del equipo.
Este año, Schwarber ha visto mucha más acción como segundo bate, pero en cuatro años con los Phillies, ha ocupado el primer lugar de la alineación en 1,590 turnos oficiales, siendo esta la posición en la que más veces ha aparecido en partidos desde su llegada a los Phillies. En general, ha disputado 515 juegos viendo turnos como punta de alineación, bateando para .226 con OPS de .842, 155 jonrones y 349 impulsadas. Ninguna otra posición dentro de una alineación lo ha visto batear tantas veces como el primer turno.
Schwarber desafía los convencionalismos de un primer bate, porque sus herramientas ofensivas son distintas a las de un primer bate convencional. Su rendimiento ha hecho que otros equipos, como es el caso de los Dodgers, experimenten con jugadores de poder en el primer turno de su alineación, poniendo de lado la velocidad y el obtener bases adicionales como prioridad, y haciendo esos elementos parte del final de la alineación.
Schawrber ha sido un experimento exitoso y es muy posible, como es tradición en los deportes profesionales, que si los demás equipos encuentran al jugador indicado, replicarán el modelo que ha hecho exitoso a los Phillies.