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Nationals va por un resultado inédito ante Brewers

Los Washington Nationals buscarán ante su público en la capital del país algo que no han conseguido en 50 años de historia de la franquicia, desde que nacieron con el nombre de Montreal Expos en 1969: avanzar a la siguiente ronda de los playoffs.

Como los Expos llegaron una sola vez a la postemporada, cuando no existían series divisionales y sólo se jugaba un playoffs por el campeonato de liga como paso previo al clásico de octubre.

Fue en 1981, cuando se midieron a Los Angeles Dodgers y perdieron 3-2 en la serie de cinco encuentros.

Desde que se mudaron a Washington en el 2005 y adoptaron el nombre de Nacionales, ganaron cuatro veces el Este del viejo circuito (2012, 2014, 2016 y 2017), pero siempre se quedaron en el camino en las series divisionales.

Ganar el juego de muerte súbita entre comodines ante los Milwaukee Brewers sería entonces un paso de avance para romper la cadena de fracasos de la franquicia en postemporadas.

Para ello, el manager Dave Martínez anunció desde hace días al derecho Max Scherzer, el gran as dentro de una rotación que tiene a otras estrellas como el diestro Stephen Strasburg y el zurdo Patrick Corbin.

Scherzer (11-7, 2.92) no tuvo la mejor de sus temporadas y se perdió cinco aperturas debido a lesiones.

Por primera vez en las últimas siete campañas no llegó a los 200 innings de trabajo, pero igualmente fue dominante, con 243 ponches en 172.1 entradas.

Tuvo un mes de septiembre pobre, con cinco salidas que le dejaron dos triunfos e igual cantidad de reveses, pero una pésima efectividad de 5.16 en 29.2 capítulos, en los que admitió 17 carreras limpias y seis jonrones.

Pero Martínez, cuyo trabajo estuvo en la cuerda floja durante la primera mitad del campeonato, tomó la decisión correcta.

Más allá de la gran campaña de Strasburg (18-6, 3.32) o de Corbin (14-7, 3.25), a este juego de vida o muerte, sin mañana, hay que ir con el hombre de mayor jerarquía, el más intimidante de los lanzadores de la Liga Nacional.

Con Anthony Rendón y el joven dominicano Juan Soto como principales artilleros, quienes batearon 68 jonrones y remolcaron 236 carreras entre ambos, Washington tiene una ofensiva compacta, aunque su bullpen es el punto flaco.

Sean Doolitle, su cerrador, salvó 29 juegos en 35 oportunidades, pero su efectividad fue demasiado alta, 4.05, lo que habla de su poca confiabilidad.

De ahí que será clave cuán lejos pueda avanzar Scherzer en el partido y cuánto apoyo ofensivo le ofrezcan sus compañeros, para que pueda entregarle el partido a los relevistas con suficiente ventaja.

Por su parte, los Cerveceros contarán en la lomita con el derecho Brandon Woodruff, quien viene de su año de consagración, al dejar marca de 11-3 y efectividad de 3.62 en 22 aperturas, aunque también perdió tiempo de juego por lesiones.

Woodruff, en su tercer año en Grandes Ligas, estuvo ausente desde el final de julio hasta la segunda semana de septiembre y a su retorno solamente tuvo dos apariciones de dos innings cada una, sin permitir ni hits, ni carreras, con siete ponches y un boleto.

Buena señal, pero demasiado pequeña la muestra para apostar por él.

Milwaukee encarará esta postemporada sin su gran estrella, el jardinero Christian Yelich, quien se lesionó en Miami el 12 de septiembre.

Sin embargo, la ausencia de Yelich ha servido de inspiración a sus compañeros –esos intangibles que no se miden en estadísticas, ni muchas veces pueden explicarse- y desde entonces, el equipo jugó para balance de 13-5, con lo que amarraron su boleto como segundo comodín.

Ryan Braun se echó el conjunto al hombro ante la falta de Yelich y empujó 18 carreras en septiembre, para llevar la voz cantante en la ofensiva, que tiene como puntales también a Mike Moustakas, Lorenzo Cain y el cubano Yasmani Grandal.

Pero entre Braun y Cain tienen de 29-0 ante Scherzer, mientras que Grandal apenas ha adivinado un hit en 13 veces.

El manager Craig Counsell ya tiene una experiencia previa en postemporada, pero en el 2018 no supo manejar la presión y dirigió de manera muy errática, lo cual pudo haberle costado a los Cerveceros el pase a la Serie Mundial.